Ocho años y medio después del cierre del complejo deportivo de Riaño por parte del Principado se ultima su reapertura completa, que se realizará con una mayor oferta de servicios. Las piscinas al aire libre han funcionado en los últimos veranos y el polideportivo presta servicio desde hace unos meses pero aún falta por poner en funcionamiento el edificio de usos múltiples, que acoge el gimnasio, la sala de entrenamiento funcional y otros espacios polivalentes. Estará en marcha a principios de verano, calcula Juanjo Corujo, director del área municipal de Deportes, que apunta que entre las tareas pendientes figura instalar el equipamiento del gimnasio.
Con la apertura de estas últimas instalaciones se completará la puesta en funcionamiento de todo el complejo deportivo, que gestiona ahora el Ayuntamiento de Langreo después de que el Principado le cediese en julio de 2016 la propiedad del equipamiento. La puesta en funcionamiento de todas las dependencias se ha retrasado pero ya se ha entrado en la recta final. A las pistas de tenis, el polideportivo y las piscinas al aire libre se unirá además del gimnasio, la zona de entrenamiento funcional y las salas polivalentes, la cancha de tiro con arco. Las obras para construir estas instalaciones se iniciarán en breve ya que ya están adjudicadas, aseguró Juanjo Corujo.
El gimnasio que podrán utilizar los vecinos a partir de principios de verano tendrá mayores dimensiones ya que se redujo el tamaño del existente. Además, se está adecuando la terraza "para que se puedan sacar máquinas cuando tengamos buen tiempo y se pueda realizar ejercicio en el exterior".
La cesión de las instalaciones iba acompañada de una inversión de 600.000 euros para su reparación. Una cuantía que se quedó corta para la reforma proyectada por el Ayuntamiento de Langreo, que consignó 50.000 euros para el equipamiento del edificio de usos múltiples. La reforma interior del complejo deportivo fue profunda. La cuantía destinada por la Consejería de Cultura, en la que se integra la dirección general de Deportes, sirvió para desarrollar varias fases de la obra, la primera centrada en las piscinas y en las pistas de tenis. La segunda se centró en la cubierta del polideportivo, que tiene una superficie construida total de 1.395 metros cuadrados. Posteriormente se abordó la mejora del interior del polideportivo. El edificio de usos múltiples se reformó en una fase posterior. Las piscinas ya fueron abiertas veranos atrás, antes incluso de que el Consistorio se hiciese cargo del complejo deportivo.
La apertura del polideportivo es más reciente. Las previsiones de puesta en marcha de estas instalaciones han sufrido retrasos. De hecho, fue reinaugurado en marzo del pasado año con el Campeonato de Asturias de gimnasia rítmica. También el acondicionamiento del edificio de usos múltiples ha generado demoras. Se tuvo que rehabilitar interiormente de forma completa debido al mal estado de la construcción. Sólo se pudieron salvar los muros exteriores y la cubierta.
A la cancha de tiro con arco destina el Ayuntamiento 12.825 euros, una obra que se impulsa ante el incremento de participantes y seguidores de esta disciplina en el concejo. En este espacio deportivo, que se habilitará en las proximidades del polideportivo, se desarrollarán los entrenamientos y las competiciones.
Tras su cierre el edificio se deterioró a un ritmo avanzado y sufrió ataques vandálicos. En octubre de 2010 cerraron estas instalaciones deportivas. El Principado planteó entonces la cesión al Consistorio, gobernado por el PSOE, pero el convenio fue rechazado por los partidos de la oposición municipal al quedar en el aire el futuro de los empleados de las instalaciones. El proyecto no salió adelante y los trabajadores fueron despedidos.
