“Sostenibilidad no quiere decir no hacer nada, abandonar a su suerte el medio natural”, aseguró ayer el presidente de la Asociación de Municipios de Montaña “Esmontañas” y alcalde del municipio oscense de Bonansa, Marcel Iglesias. El colectivo, que integra a 274 municipios y tiene cuatro diputaciones provinciales asociadas, celebra en Rioseco su sexto congreso, que se centra en el medio ambiente, el turismo y la economía circular en los pueblos de montaña.
Iglesias resaltó, en el centro cultural Vicente Álvarez de Sobrescobio, que “sin desarrollo no habrá sostenibilidad” y que “hay que ser capaces de conjugarlos”. “Nos encontramos, a veces, con protecciones y legislaciones que son un poco decimonónicas. Son de otro tiempo”, apuntó el presidente de “Esmontañas”.
Iglesias pidió ayuda para los modos tradicionales de esas zonas, sobre todo para “la ganadería extensiva y la selvicultura”, Y es que, subrayó, “es difícil hacer el relevo generacional”. También hizo un llamamiento a armonizar estas actividades con otras que se desarrollan. Junto al presidente de “Esmontañas, intervinieron en la inauguración oficial del congreso el presidente del Principado, Adrián Barbón; el alcalde de Sobrescobio, Marcelino Martínez, y el responsable de Medio Rural de Caja Rural de Asturias, Javier Nievas.
Barbón resaltó que “no podemos conformarnos con que los pueblos de montaña sean un escaparate etnográfico o un parque temático”. Con ese planteamiento, indicó, “nunca frenaríamos la pérdida de habitantes: convertiríamos a buena parte de esas zonas en una especie de decorados de cartón piedra preparados para una vida intermitente que latiría en fines de semana y vacaciones”.
“Por eso siempre aúno los verbos ‘vivir y trabajar’”, añadió. El jefe del Ejecutivo autonómico apuntó que “necesitamos equipamientos educativos y sanitarios, servicios sociales para combatir la soledad no deseada, buenas comunicaciones, que las entidades financieras no incentiven la desertización demográfica… Necesitamos todo eso y, además, rentabilidad económica”.
Barbón enumeró los objetivos del colectivo para este año que reúne a municipios de montaña como la mejora de la conectividad con la extensión de la banda ancha, adaptar la legislación, utilizar la identidad local como estrategia de desarrollo y aprovechar las artes creativas como oportunidad para los territorios de montaña. “El Gobierno del Principado comparte y respalda todas esas metas”, dijo para destacar a continuación que 69 de los 78 concejos de la comunidad autónoma son considerados zonas de montaña. “Para Asturias la montaña no es un accidente geográfico, es una seña de identidad”, afirmó.
El presidente del Principado apuntó al fomento del ecoturismo como una de las prioridades. Y destacó entre los proyectos impulsados por el Ejecutivo regional los destinados a “podar el exceso de burocracia, una queja reiterada en el medio rural”. “No se pueden tener oídos sordos a sus reivindicaciones”, recalcó Adrián Barbón, que alertó de “fuerzas políticas que se han especializado en la crispación y la mentira para utilizar el campo como granero electoral”
El alcalde de Sobrescobio, Marcelino Martínez, hizo hincapié en que la capitalidad del colectivo que integran los municipios de montaña, que ostenta este año, es “un reto pero también una gran oportunidad”. “Nos ha dado la posibilidad de aprender de otros municipios de montaña, de conocer proyectos emprendedores y ser escaparate del medio rural”, aseveró.
