La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Cadasa iniciará en enero la demolición de la antigua piscifactoría de Rioseco para ampliar la "fuente de Asturias"

La primera fase de las obras para aumentar la potabilizadora que da de beber a la zona centro de la región concluirá en otoño del próximo año

Instalaciones de la antigua piscifactoría de Rioseco. | L. M. D.

El derribo de la antigua piscifactoría de Rioseco se iniciará en enero. Esos son los plazos que maneja el Consorcio de Aguas de Asturias (Cadasa) para poner en marcha la primera fase de la obra que le permitirá disponer de un mayor volumen de agua de los embalses de Tanes y Rioseco para el abastecimiento de la zona central de Asturias. El desmantelamiento de las instalaciones, que ocupan 14.000 metros cuadrados, habrá finalizado, si no hay ningún contratiempo, para otoño del próximo año.

Estos trabajos tienen un presupuesto de 1.572.993 euros y un plazo de ejecución de ocho meses. La actuación que impulsa Cadasa se enmarca en un proyecto cuya inversión total es de 38,4 millones. Los terrenos y la concesión administrativa de aguas de la piscifactoría fueron adquiridos en 2019 por el Consorcio de Aguas de Asturias.

Después, el nuevo propietario presentó un proyecto ante la Confederación Hidrográfica para modificar las características del aprovechamiento de aguas del río Nalón. Incluye la construcción de un nuevo depósito de agua y de un laboratorio central además de una nueva potabilizadora para tratar el caudal de la piscifactoría, que tenía una concesión de 1.000 litros por segundo. Se podrán suministrar hasta 4.500 litros por segundo, frente a los 3.500 actuales.

En la actual potabilizadora se acometerán labores de ampliación y mejora. Estas instalaciones fueron construidas en 1982 y desde entonces presta servicio de forma ininterrumpida. Cadasa proyecta una reforma en la planta pero su diseño hace que no sea posible realizar determinadas labores de mantenimiento en varios de los elementos sin que se produzca una parada total de la instalación. Y el tiempo máximo que puede quedar detenida no puede superar las 24 horas por, indica el Consorcio de Aguas de Asturias, la "elevada dependencia del sistema de abastecimiento de la zona central que presentan varios municipios".

Mientras se ejecuten los trabajos funcionará la nueva potabilizadora que se construirá en terrenos de la antigua piscifactoría. En esa parcela se conserva un edificio, varias balsas, una nave industrial y varios cobertizos y casetas. En la margen del río hay un canal que recoge el agua de las balsas, para devolverla al río.

Todas las construcciones serán derribadas. Están en ruina y no son aprovechables para las actuaciones planteadas de mejora de la estación de tratamiento de agua, sostiene Cadasa. Es el primer paso para desarrollar el proyecto. De todas las obras previstas la que precisará de una mayor inversión es la de la ampliación de la Estación de Tratamiento de Aguas de Rioseco, con 14,5 millones de euros. A la adecuación tecnológica de las instalaciones actuales se destinarán seis millones.

Ambas actuaciones junto con la construcción de la nueva planta potabilizadora y del laboratorio central superan los 38 millones de euros. El Consorcio de Aguas de Asturias ya ha licitado el derribo de la piscifactoría del Alba. El plazo de presentación de ofertas está abierto. La previsión del organismo regional apunta a que el próximo mes se celebre la primera reunión de la mesa de contratación para analizar las ofertas presentadas.

Las obras de demolición podrían empezar, si todo discurre sin inconvenientes, en el mes de enero del próximo año. Los terrenos quedarían despejados para otoño y Cadasa podría poner en marcha entonces las siguientes fases del proyecto.

Compartir el artículo

stats