El Principado recula y Mieres teme perder el Centro de Crisis para víctimas de agresiones sexuales proyectado en Figaredo

El Ayuntamiento afirma que el Gobierno regional descarta ahora el chalé mierense por el uso público de sus jardines, algo que el Consistorio ya ha corregido en el nuevo PGOU

Andrés Velasco

Andrés Velasco

Fue el pasado diciembre cuando la directora general de Igualdad, la turonesa Nuria Varela, presentaba en el Ayuntamiento de Mieres junto al alcalde, Aníbal Vázquez, y la entonces concejala del ramo, Nuria Ordóñez, el proyecto del Centro de Crisis para mujeres víctimas de agresiones sexuales. Un servicio que se iba a trasladar desde Oviedo al chalé de Figaredo, y que contaba con una inversión de casi millón y medio de euros de fondos europeos. Sin embargo, diez meses después, nada se ha hecho, y el Principado parece haber reculado de su idea inicial. Fuentes municipales han confesado que temen que se pierda el proyecto para Mieres, y exigen al Gobierno de Adrián Barbón que cumpla con los compromisos adquiridos con el municipio.

El problema que surgió para el traslado de este centro de crisis, ubicado en Oviedo, fue que los jardines anexos al chalé de Figaredo están abiertos al público, algo que choca frontalmente con la necesidad de privacidad que se necesita en esta clase de equipamientos. Sin embargo, desde el gobierno de Mieres, una vez que se les comunicó este hecho, prepararon y presentaron varios informes al Principado explicando que el problema estaba solucionado, ya que el nuevo Plan de Ordenación Urbana (PGOU) corrige este extremo, siendo estos jardines privados, por lo que las motivaciones del Principado quedarían invalidadas.

"Estamos preocupados, puesto que es un proyecto muy interesante para Mieres, y que ayudaría a muchas mujeres. Las instalaciones, como desde el propio Principado reconocieron, son ideales para el Centro de Crisis, y exigimos que los trabajos se pongan en marcha, y que se pueda desarrollar el proyecto", señalaron desde el gobierno local.

Hace casi diez meses, la responsable regional de Igualdad se deshacía en elogios hacia el proyecto planteado en Figaredo que ahora, como mínimo, sufrirá un enorme retraso si finalmente no es cancelado. Durante la presentación del nuevo Centro de Crisis, Nuria Varela resaltaba que este servicio había nacido en 2020 en Asturias de una forma "humilde" y gracias a los fondos del pacto de Estado contra la Violencia de Género. Sin embargo, el pasado ejercicio, el Principado había recibido una ayuda de 1,4 millones "para poder llevar el centro a un lugar emblemático y adecuado". Explicaba entonces Varela que el Centro de Crisis para mujeres víctimas de agresiones sexuales atiende a toda Asturias, y que "la ubicación del chalé de Figaredo nos permite en hora y media poder estar en cualquier lugar para la atención que se requiera".

Además, la responsable regional hablaba de nuevos horizontes para el servicio con la nueva ubicación del chalé de Figaredo: "Nos permitirá realizar formaciones, terapias de grupo e incluso tener una residencia para aquellas mujeres que necesiten pernoctar una noche o varias". En ese momento, las mujeres tenían un espacio reservado en la Casa Malva, pero la idea es que desde finales de este 2023, cuando se preveía que el centro ya estuviese operativo en Mieres, podrían hacerlo sin desplazarse. En este sentido, el chalé de Figaredo permitiría también, previo acuerdo con la administración de Justicia, que las víctimas pudiesen declarar desde el propio chalé, sin tener que desplazarse al juzgado y verse cara a cara con sus agresores. En el centro iban a trabajar decena y media de personas, las mismas que lo hacen en su sede de Oviedo, que se iba a cerrar. En todo caso, desde el Principado no se descartaba ampliar plantilla.

"No podemos permitirnos perder un proyecto como este, y esperamos que el Gobierno regional recapacite, ya que las trabas que había para el desembarco del centro de Crisis en Figaredo están solucionadas vía plan general urbano", manifestaron desde el Ayuntamiento.

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