Alfonso Pombo: "Es muy gratificante ver despegar a la gente a la que ayudas"

El misionero laico recibió el galardón a la solidaridad de Mierenses en el Mundo

Mario Vigil, Loli Olavarrieta, el premiado Alfonso Pombo, el alcalde de Mieres, Manuel Ángel Álvarez,  Marifé Tuñón y Carmen Iglesias,ayer en Mieres.

Mario Vigil, Loli Olavarrieta, el premiado Alfonso Pombo, el alcalde de Mieres, Manuel Ángel Álvarez, Marifé Tuñón y Carmen Iglesias,ayer en Mieres. / A. V.

Andrés Velasco

Andrés Velasco

El mierense Alfonso Pombo ha vuelto a su tierra. Será por pocos meses. Tras casi tres años en Honduras, este misionero laico ha terminado su tarea en el país latinomericano, en el que participó ayudando a jóvenes de la zona rural con su educación y formación. "Cuando ves a un chaval que ayudaste despegar y alejarse de las bandas y otros problemas es gratificante", señala Pombo. Su llegada a Mieres, además, le ha permitido recoger por fin el galardón a la solidaridad concedido por "Mierenses en el Mundo", y que la ha sido entregado por la presidenta del colectivo, Loli Olavarrieta, en la Casa de Cultura de Mieres.

Pombo formó parte de la nómina de premiados de la edición de 2023 de "Mierenses en el Mundo". Una gala celebrada en San Xuan en la que el periodista Pablo Pardo Naredo recibía un galardón que ostentan otros ilustres vecinos del concejo, como José Andrés, Víctor Manuel o el Padre Ángel. El nombrado como embajador de la Mierensía, el guitarrista Pablo Sáinz Villegas recibía su distinción en octubre. Y ahora fue el turno para el premio solidario.

Alfonso Pombo llevaba en Honduras desde febrero de 2021. "Es un lujo volver a casa después de tanto tiempo sin pisar Mieres, sin pisar España, para poder estar con la familia y pasar las fiestas", señalaba el misionero, que se mostró muy "ilusionado" con el reconocimiento de "Mierenses en el Mundo": "Cuando piensan en tí tus vecinos y la gente del pueblo donde naciste para un galardón de este tipo es siempre muy reconfortante".

Tras tres años en Honduras, a Pombo no se le han terminado las ganas de seguir ayudando, y su estancia en Mieres será de apenas unos meses. "La idea es volver a salir, y aunque iré donde me manden, lo cierto es que hay un par de proyectos en la selva amazónica de Perú, que iremos a ver en febrero o marzo, y que una vez se defina lo que podemos aportar, nos iremos", señalaba el misionero. Dejará de nuevo Mieres, pero su solidaridad ya ha quedado reconocida en el palmarés de los "Mierenses en el Mundo".

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