Madrid, Efe

El Real Madrid recibe en el estadio Santiago Bernabeu al necesitado Murcia de Javier Clemente, que nunca ha vencido en el coliseo blanco, con el regreso de Robinho al equipo titular de un líder que, venciendo los encuentros en su estadio, pondrá rumbo directo al título liguero.

Javier Clemente visita el Bernabeu y él mismo se ha encargado de poner picante a un partido clave para el título, en el Real Madrid, y para la permanencia en Primera División para el Murcia.

El respeto a la historia de Clemente ha sido la respuesta de Bernd Schuster y la plantilla madridista a las declaraciones del entrenador de Baracaldo. Durante la semana ha hecho polémicas declaraciones sobre un sector de la afición blanca, a la que acusó de «inculta» y de pasarse los partidos insultándole cada vez que ha visitado la casa blanca. «En el Bernabeu hasta me llegaron a sacar una navaja», confesó Clemente, que ha intentado picar a Schuster aludiendo a los árbitros y sus «llantos». No ha habido respuesta desde Madrid. Respeto y admiración es lo que ha mostrado el técnico alemán.

Será sobre el césped la respuesta que quiere dar la plantilla blanca para acercarse al título. Convencidos de que para ser campeones les sirve con vencer los encuentros que restan en el coliseo blanco, el Real Madrid saltará a por el triunfo con novedades.

La baja de Sergio Ramos, por sanción, en el lateral derecho y la ausencia de última hora de Cannavaro provocan que Miguel Torres y Pepe sean las caras nuevas de la zaga. En ataque, Schuster también realizará cambios. La hora de los extremos llega y a la velocidad de Robben se sumará el desborde de Robinho, con Raúl de rematador esperando balones de gol.

El empate de la última jornada en Mallorca cambió del sábado al domingo con la derrota del Villarreal y el empate del Barcelona. Los siete puntos de distancia se mantienen con los dos perseguidores y la concentración será máxima para evitar despistes ante un Murcia que desafía a la lógica y la historia.

Visita el Murcia el Bernabeu dispuesto a conculcar la lógica que le postula como firme candidato a salir goleado de Chamartín. No en vano se trata del peor equipo en la segunda vuelta de la competición, y sólo en una de sus dieciséis visitas ha logrado puntuar en el feudo madridista. Fue en la temporada 1973-74, cuando los granas lograron la «proeza» al empatar a un gol.