Mieres del Camino, M. I.

El Caudal de Mieres tiene esta jornada en el Hermanos Antuña una prueba de fuego frente al segundo clasificado el Universidad de Oviedo que tras encarrillar 16 jornadas sin conocer la derrota hasta que lo batió el Ceares llega al feudo mierense con seis puntos de ventaja sobre los de José Manuel Martínez.

El equipo blanquinegro que en los dos últimos partidos ante Cudillero y Real Oviedo no dio la talla como reconoce su portero y capitán Mingote respeta mucho a los estudiamtiles pero para nada les teme. A los mierenses no les impresiona tampoco la formidable racha que acumuló el Universidad de Oviedo y sólo piensan en volver a la senda de los buenos resultados como sucedio en las jornadas previas a los enfrentamientos con los pixuetos y oviedistas cuando encadenarón siete partidos sin perder.

Los pupilos de José Manuel Martínez que tiene un complicado calendario por delante, ya que después de recibir a los estudiantiles se veran las caras con Ribadesella, Sporting B y Avilés Industrial, sólo piensan en ir partido a partido y lo primero como asegura Mingote «es sacar la victoria contra el Universidad de Oviedo, puesto que de lo contrario la promoción estará casi perdida y después ya se verá lo que pasa en los próximos encuentros». El guardamete blanquinegro reconociendo el potencial estudiantil tiene claro que «si hacemos las cosas como sabemos, marcamos un rítmo alto de partido y jugamos con confianza seguro que los tres puntos se quedarán en Mieres». El capitán del Caudal Deportivo también señala que «el objetivo más inmediato es recuperar la buena dinámica de los partidos anteriores al Cudillero y Oviedo y desde luego mientras haya posibilidades matemáticas no vamos a bajar los brazos por el prestigio del club».

Otro de los jugadores que es santo y seña del plantel mierense y que también ejerce funciones de capitán dentro de la plantilla es Iván Parra quien señala que «lo que está claro es que si ganamos los cuatro partidos que restan jugaremos la liguilla». No obstante, Iván Parra coincide con su compañero en que «hay que ir paso a paso y lo primero es salvar la primera final que tenemos ante el Universidad de Oviedo para después pensar en el siguiente rival». El medio blanquinegro reconoce que«en casa debemos dar un giro de 90 grados y como se suele decir por lo civil o lo criminal tenemos que sacar los dos encuentros que vamos a jugar frente al Uni y Sporting B, pues de lo contrario será casi imposible poder clasificarse para la liguilla, salvo que los demás equipos fallen».