Oviedo, N. A.

La labor de José Manuel en la dirección técnica no se limita al primer equipo. A pesar de que la actualidad del Real Oviedo parece exclusiva de los hombres de Pichi Lucas, la dirección deportiva ya trabaja de cara a reforzar la imagen de la cantera azul, algo tocada tras el doloroso descenso del juvenil de división de honor. «No creo que el descenso del equipo de División de Honor nos haga perder jugadores importantes en las categorías inferiores», asegura un optimista José Manuel; «nosotros trabajamos con un modelo definido que busca producir jugadores para el primer equipo del Oviedo. Ofrecemos una metodología de trabajo que los padres de los chavales valoran, a pesar de que otros clubes puedan ofrecer luchar en categorías más competitivas».

El club trabaja ahora en la configuración de los equipos juveniles, empezando por los entrenadores que se darán a conocer en los próximos días. Desde el club se tiene claro el perfil que se demanda. «Tantos los entrenadores como los jugadores deben ser competitivos. Los dos juveniles parten con el mismo objetivo: conseguir el ascenso», resume José Manuel.

La alegría oviedista de la temporada tiene nombre propio: el Vetusta. El filial azul ascendió por tercera vez consecutiva y sirvió de formación a jugadores de la talla de Artabe, Nacho Méndez o Ernesto. Con su paso a Tercera, el salto cualitativo será importante y el director deportivo tiene claro el máximo culpable de este éxito: «Contamos con Velázquez porque es una persona plenamente integrada en el Real Oviedo. Seguirá en el club y lo normal es que lo haga en el Vetusta, pero aún no hay nada definitivo».