Sotrondio, P. ANTUÑA

El histórico San Martín está atravesando su peor momento a nivel económico y deportivo. La continuidad de club pende de un hilo y ahora mismo, el San Martín no tiene entrenador. La semana pasada el club fichaba a Juanjo Corujo para sustituir la baja de Marcos Álvarez por motivos laborales. Tras una primera de contacto con los jugadores, Juanjo Corujo encontró impedimentos para tramitar su ficha de entrenador con la federación asturiana de fútbol. Una deuda del San Martín le impide firmar con el club para ejercer su cargo. De ahí que esta semana el conjunto del Florán no se haya entrenado y que ahora mismo no pueda garantizar quién dirigirá al conjunto sotrondino mañana a partir de las doce de la mañana para recibir al Ribadesella.

Pese a todo, el club de Sotrondio está haciendo un esfuerzo para salir de este bache. Ayer, en una asamblea de socios se trató el tema para intentar reconducir la situación y buscar soluciones que eviten la desaparición del club. En dicha asamblea, tres socios mostraron su disponibilidad para formar una junta gestora provisional que se encargue de reconducir esta situación y que supondría el cese del presidente del San Martín, Jesús González.

Sin embargo, el club volverá a convocar otra asamblea la próxima semana con la intención de que algún socio más quiera formar parte de la junta gestora y así formalizar este proceso de transición del club. En ese momento, en caso de que se presente esta alternativa con suficientes efectivos para formar la junta gestora, el presidente del club dejaría su cargo y se pondrían en marcha las conversaciones con la federación asturiana de fútbol para poder tramitar la ficha del futuro entrenador del San Martín.

Este bache en el apartado económico e institucional llega en un momento en el que el San Martín es decimoquinto en la clasificación con 25 puntos -dos por encima del descenso- y con un partido muy importante frente al Ribadesella, el equipo que marca los puestos de descenso.