Ribadesella, J. M. CARBAJAL

Llegar y besar el santo. Un deportista vizcaíno, aficionado a la pesca de la trucha pero novato en el salmón, fue el afortunado que capturaba en la mañana de ayer el primer salmón de la temporada en la cuenca del Cares-Deva, concretamente en el coto de Peñarredonda, en la zona alta del curso fluvial más oriental del Principado. Un estupendo ejemplar que daba en la báscula del centro oficial de precintaje de El Tilo un peso de 8,050 kilos; con 92 centímetros de longitud y 47 de perímetro.

«Era la primera vez que pescaba a salmón», explicó Andoni Vallate, de 24 años y natural de Balmaseda (Vizcaya). Y lo consiguió utilizando una caña tipo «spinning», de las habituales para la trucha aunque con nailon de 0,40 típico para el salmón, y utilizando como señuelo la cucharilla. «Tardé más de media hora en sacarlo», añadió Vallate, quien vendía el ejemplar a los restaurantes El Campanu de Ribadesella y Cangas de Onís por 4.000 euros.

El mismo coto de Peñarredonda daba poco después un segundo salmón, en esta ocasión echado a tierra por el también vizcaíno Josu Ruiz Marín, compañero de Vallate y como él debutante en el salmón. Lo capturó utilizando como cebo el devón y su peso fue de 8 kilos justos, con 94 centímetros de longitud y 46 de perímetro.

A partir de hoy y hasta el 14 de junio se permiten todos los cebos para la pesca del salmón tras dos semanas en las que únicamente estaba autorizado el devón, la cucharilla y la mosca artificial. Además, el horario hábil se incrementa de 7.40 a 21.55 horas.