Pablo Carreño está ya en Gijón tras completar la que en propias palabras fue la mejor temporada de su vida. En estos momentos ocupa el puesto 30 del ranking de la ATP, lo que le permitirá ser cabeza de serie en Australia, uno de los cuatro grandes torneos del año.
-¿Cómo valora la temporada?
-Fue muy buena, sin duda la mejor de mi carrera.Se cumplió el objetivo del año y estamos contentos, tanto yo como mi equipo. Hemos trabajado muy duro, pero al final el trabajo ha tenido recompensa y con ganas de que empiece ya la próxima.
-¿Esperaba que fuese tan buena?
-Mi entrenador al principio de la temporada, cuando hablábamos de los objetivos, me decía que había que ganar algún torneo y estar en torno al 30 del mundo. Yo lo veía más complicado, no estaba del todo convencido de poder llegar hasta ahí. Al poco de trabajar con ellos y ver que iba creciendo como jugador sí me fui convenciendo de que iba a lograrlo. Y mira, el 30 clavado y ganando dos torneos ATP.
-¿Qué influencia tuvo el cambio de entrenador?
-Siempre que haces un cambio es porque buscas algo nuevo, que te ayuden de manera diferente y también das un cambio de mentalidad. Los entrenadores me aportaron frescura. Igual me decían las mismas cosas que antes pero de diferente manera. Al viajar con dos personas diferentes, el año se hace un poco más ameno. En cuanto a juego he sido más agresivo en todo momento, he mejorado en el saque o en jugar cerca de la red. Todo junto y el cambio de mentalidad que di hace que haya llegado este cambio.
-¿En que trabaja para seguir con la progresión?
-Seguir en esta línea, sabiendo que puedo estar ahí arriba y ganar torneos. Ser agresivo y trabajar mucho el físico. En cuanto vaya jugando partidos contra los mejores iré mejorando.
-También ha debutado en la Copa Davis.
-Siempre había sido un sueño. De pequeño lo veía en la tele y representar a mi país siempre es un orgullo. Además, en el tenis siempre se juega individual y la Davis es en equipo. Pude debutar en la eliminatoria contra Rumanía y ascendimos al grupo mundial. Ojalá que la capitana siga contando conmigo y pueda jugar más eliminatorias.
-¿Cuál fue su mejor momento y el peor?
-El mejor, fue cuando logré mi primer título individual en Winston Salem. Esa victoria me liberó y me dio la convicción de que puedo ganar torneos. A partir de ahí las cosas fueron mejor. Por suerte, no tuve muchos momentos malos. Quizás el peor llegó después de Roland Garros, que estuve lesionado tres semanas. No fue grave, pero tuve que parar.
-¿Su mejor partido?
-Es difícil porque he jugado muchos este año. La final de Winston Salem contra Bautista fue muy disputada y la conseguí levantar tras ir un set abajo. En Moscú también levanté el partido, perdí contra Monfils en Indian Wells en un partido muy duro contra el número 6 del mundo. En Basilea, contra Cilic, él empezó muy bien, pero en el segundo set me rehice y se lo puse difícil. En total fueron 40 victorias esta temporada.
-¿Por qué tantos dobles?
-Porque al mejorar el ranking, tanto de singles como de dobles, me permitió entrar en más torneos. Antes hubo torneos que no los pude jugar porque no entraba por ranking. Este año sí entré, por lo que he jugado más y encima me han ido bien las cosas. Eso también me ha servido para mantenerme en competición y mejorar algunas cosas para los individuales.
-¿Seguirá jugándolos?
-Sí, mientras no me penalice para los individuales.
-¿Cómo se toma el ser cabeza de serie en un torneo del Grand Slam como es Australia?
-Estoy el 30 del mundo, pero queda una semana puntuable para Australia, que es la primera de enero. Espero que no me adelanten más de dos jugadores para poder ser cabeza de serie. Sin duda es algo muy bueno porque, en principio, te ayuda a tener unos rivales más asequibles. No me tocarán Murray, Djokovic, Nadal, Federer o uno de estos en primera rondas. Hay que aprovecharlo porque nadie te lo va a regalar.
-¿Qué planes tiene?
Ahora voy a estar dos semanas de vacaciones. A descansar, a estar con la familia y desconectar. Luego empezaré la pretemporada hasta la segunda semana de enero.
-¿Su primer torneo?
-Será Sydney o Oakland, todavía no lo tengo decidido.
-Murray acaba de ponerse número uno ¿lo ve con capacidad para seguir ahí?
-A principios de año Djokovic era superior, pero Murray subió su nivel a lo largo de la temporada y Djokovic lo bajó. No es fácil llegar a ser número uno, pero es más difícil mantenerse. Murray llegó con fuerza. Hay que ver lo que aguanta.
-Jugadores como Nadal o Djokovic están pagando la dureza del calendario. ¿No lo hablan para cambiar?
-Se habló mil veces que el calendario está muy lleno, que son muchas semanas de competición. Este año he jugado mucho y me ha ido bastante bien, pero quizás el año que viene tendré que escoger para jugar menos partidos.
