El Langreo afronta una de las salidas más complicadas de las que le restan en el calendario. Los de Hernán visitan mañana Anduva (17 horas) para medirse al Mirandés. Pese a jugar ante a un rival de la zona alta, el técnico azulgrana reconoce que, con su buena clasificación, afrontan el partido de una manera desahogada. "Afrontamos el partido con ilusión, estamos en un buen momento y el colchón de puntos que tenemos nos permitirá ser valientes, atacar", apunta.

Ambición no le va a faltar al equipo langreano. El Langreo buscará aprender de las últimas derrotas ante equipos de la zona alta de la tabla. "En Logroño y Barakaldo estuvimos cerca, quizás nos faltaba la experiencia para ganar estos partidos, pero creo que la hemos adquirido", destaca el entrenador.

Con 35 puntos, el Langreo cuenta ya con una renta de 13 respecto al descenso. "Nuestro objetivo es la permanencia y cada vez estamos más cerca; vamos a tratar de asegurarla lo antes posible, lo que nos permitiría afrontar el tramo final de la competición con muchas ganas, y si conseguimos pronto 45 puntos podremos reorientar los objetivos".

El equipo asturiano es uno de los máximos anotadores de la categoría, con 33 tantos. "Nuestra idea siempre es ir a buscar la portería contraria, es arriesgada", destaca el entrenador. Para Hernán su equipo ha dado un paso adelante en el apartado defensivo. "Empezaron haciéndonos muchos goles, pero hemos reducido esa diferencia", apunta.

Respecto al rival, destaca que "el Mirandés es un equipo hecho para jugar el play-off y para pelear el campeonato". También se pronuncia sobre un estadio con la solera de Anduva. "Es bonito, mucha gente te lo dice. Yo cambiaría jugar unos minutos por estar en el banquillo, pero los protagonistas son los futbolistas".

El Langreo afrontará el choque con las bajas de Omar, Calvillo, Javi Sánchez y Héctor Nespral. "Es mejor tenerlos a todos, pero cualquiera que salga da la cara y cumple", apunta Hernán.