El Allianz Arena dijo adiós a una época, la liderada por el holandés Arjen Robben y el francés Franck Ribery, que se despidieron de su periplo en el Bayern Múnich con la consecución del séptimo título consecutivo de la Bundesliga, gracias a la goleada por 5-1 ante el Eintracht Francfort que le permitió ignorar lo que ocurrió en los otros estadios. Ribery se despide con nueve títulos de la Bundesliga en su cuenta personal, un récord que no comparte con nadie. Robben se va con ocho.