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Victoria por 70-82 del Liberbank Oviedo Baloncesto en Melilla: Este OCB merece la pena

El Liberbank Oviedo da un paso de gigante hacia la permanencia tras superar al Melilla en un partido ganado con un gran trabajo colectivo

Oliver Arteaga se dispone a pasar ante Mbaye y Javi Marín. Melilla Sport

El Liberbank Oviedo dio ayer un paso de gigante hacia el objetivo de la permanencia tras superar al Melilla en un partido que mereció ganar desde el primer hasta el último minuto. Por ganas, por intensidad y por la sensación de equipo unido y bien trabajado que dio durante todo el choque. La victoria pudo haber sido más cómoda, pero el OCB estuvo poco acertado en el tiro y, cómo no, tuvo en los minutos finales ese miedo a ganar que ya le ha costado algunos disgustos muy serios. El fantasma ante el Melilla estuvo en los errores desde la línea de personal, sobre todo en los últimos minutos y con el partido prácticamente ganado. Lo solventaron bien.

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El Liberbank Oviedo Baloncesto gana en Melilla (72-80) Antonio Lorca

Lo bueno de este Oviedo Baloncesto es que da la sensación de que cada vez hay más jugadores a buen nivel. Pablo Ferreiro tuvo que asumir muchos minutos por la lesión de Harald Frey, que estará alrededor de un mes de baja, y lo hizo con solvencia. También fue un placer ver a Saúl Blanco asumir responsabilidades en el equipo en los momentos importantes y dejar atrás sus errores desde la línea de tres (1 de 7 en triples) para acabar sumando 13 puntos y tomando casi siempre buenas decisiones. Lo de Oliver Arteaga es caso aparte. El pívot canario anotó 14 puntos, sumó 23 de valoración y volvió a ser el puntal ofensivo de un OCB del que es el líder y el corazón.

El inicio del partido fue fulgurante y tuvo en Elijah Brown –otro que ayer rindió a muy buen nivel y que tomó mejores decisiones que otros días– a su gran protagonista. Siete puntos consecutivos (0-7) anotó el estadounidense en poco más de dos minutos. A partir de ahí, el OCB se trabó, se le apagó la luz en ataque y dejó que el Melilla, sin grandes alardes, igualara el partido. Un triple final de Ferreiro permitió al conjunto asturiano irse uno arriba (16-17) al segundo cuarto.

Un parcial en el que Arteaga y Blanco tomaron los mandos ofensivos de un OCB que estaba defendiendo muy bien, siendo capaz de frenar a los dos jugadores más peligrosos del rival, Alec Wintering y Misters. Entre los dos sumaron ayer solo once puntos. Pero, aunque daba la sensación de que el OCB estaba haciendo muchas cosas bien, la distancia al descanso era solo de cuatro puntos (33-37).

Tras la salida de vestuarios, el Melilla se acercó a dos puntos, pero un triple de Norelia devolvió la confianza al OCB, que fue tomando otra vez una nueva ventaja que llegó a ser de once puntos (39-50) tras una canasta de Arteaga a 3:30 de acabar el tercer parcial. Y otra vez el equipo tuvo uno de sus clásicos desfallecimientos y en un minuto el Melilla se había puesto a tres puntos (47-50). Aún quedaban dos minutos y medio y Blanco le echó personalidad al asunto para que, con cinco puntos suyos y dos más de Kabasele, el OCB se fuera a los últimos diez minutos con una renta de ocho puntos (49-57).

Un último cuarto que pudo haber sido plácido para el equipo de Oviedo, pero en el que, a pesar de estar casi siempre con rentas en torno a los doce puntos, no fue capaz de cerrar bien el duelo. Y eso que el equipo, con Speight tomando el mando, tuvo muy buenos minutos en ataque y en defensa. Lo peor fueron los nervios del final, que se tradujeron en errores en los tiros libres que permitieron a Melilla ponerse a cuatro puntos (70-74) a 1:32 del final. Pero Speight demostró que ha aprendido de los errores y paró cualquier rebelión.

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