El Real Oviedo se reivindica con una goleada al Burgos

Sobre el impresionante triunfo azul y sus efectos

Pedro Allongo

Pedro Allongo

El Real Oviedo se resarció de la derrota en el derbi asturiano con una contundente victoria por 5-0 ante el Burgos en el Carlos Tartiere. Los azules mostraron su mejor versión y desplegaron un fútbol vistoso y efectivo que dejó sin opciones al rival.

El equipo de Luís Carrión salió con ganas de reaccionar tras el tropiezo en El Molinón y pronto se adelantó en el marcador. Esto dio tranquilidad y aplomo al equipo que era dueño y señor del centro del campo capitaneado por un Santi Cazorla que volvía a la titularidad dando una lección de calidad y visión de juego.

El Real Oviedo no bajó el ritmo en la segunda parte a la que se llegó con un contundente 3-0 y siguió dominando el encuentro con solvencia. El equipo dio una alegría a su afición y sumó con solvencia tres puntos frente a un Burgos que llegaba a Oviedo justo por encima en la tabla. El equipo azul demostró que tiene calidad, carácter y ambición para pelear por el objetivo.

No era fácil, y como bien dijo Carrión, "después de una derrota toca ganar", y así se hizo. Hubo cambios en el equipo y aún con ellos el equipo respondió, esto reafirma que el banquillo o fondo de armario no desentona con los supuestos titulares. Esto en una competición tan larga como la Segunda División marca diferencias.

Sabemos que queda mucho pero es innegable que el juego que se vio el Sábado en el Carlos Tartiere hacía mucho tiempo que no se veía. Cada vez hay más licencia para soñar con cotas altas.

¡Hala Oviedo!

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