Los sindicatos de Liberbank ratificaron ayer su rechazo al plan de ajustes que el banco pretende aplicar para abaratar sus costes en 22 millones al año. En la segunda reunión del período formal de consultas, la mayoría de organizaciones presentó un informe que, sostienen, "desmonta" los argumentos económicos en los que se apoya Liberbank para plantear un nuevo expediente de regulación temporal de empleo con recortes de salario y beneficios sociales. La dirección del banco, transmitieron los sindicatos, avisó de que, si no se llega a un acuerdo, aplicará los ajustes unilateralmente. Las centrales se movilizarán en Madrid el próximo jueves.