La compañía energética española Repsol se sumará al proyecto de la eléctrica portuguesa EDP para convertir el actual conjunto termoeléctrico de Aboño en un gran complejo de hidrógeno, uno de los tres grandes proyectos del grupo luso para la transición energética en Asturias, para los que anunció en mayo una inversión de 470 millones.
El acuerdo entre las dos multinacionales, firmado en la embajada española en Lisboa, supone que EDP se involucrará a su vez en el proyecto de hidrógeno que lidera Repsol en el País Vasco, que la petrolera colaborará en el proyecto que encabeza EDP en Sines (Portugal) y que ambas sociedades analizarán otros posibles desarrollos de hidrógeno verde en la península Ibérica. Los dos grupos ya eran socios en el parque eólico marino flotante de Viana do Castelo (Portugal).
La alianza refuerza el potencial del gran proyecto de “valle del hidrógeno” en Aboño, uno de los más ambiciosos que EDP ha anunciado en su estrategia de ser 100% verde en 2030. EDP España (sucesora de la compañía asturiana Hidrocantábrico) es la mayor empresa de generación eléctrica en Asturias y, aunque vendió su cartera de pequeños consumidores a Total en 2020, es líder en grandes clientes industriales en la región.
Repsol es desde 2018 (tras la adquisición de varios negocios de Viesgo) la segunda eléctrica en Asturias por número de clientes (por detrás de Total) y la segunda (tras EDP) en generación una vez que adquirió a Viesgo los embalses del río Navia y de Picos de Europa. Los dirigentes de Repsol anunciaron ayer una revisión de su plan estratégico anunciado en noviembre para incrementar su apuesta por el hidrógeno con una inversión de 2.549 millones hasta 2030 para disponer de 552 megavatios en 2025 y de 1,9 gigavatios cinco años después, el 58% más de lo que preveía hace once meses.
Miguel Stilwell, consejero delegado de EDP, y Josu Jon Imaz, primer ejecutivo de Repsol, coincidieron en que la alianza permitirá acelerar la descarbonización y afrontar los retos tecnológicos y regulatorios que aún supone la apuesta por el hidrógeno.
Además del proyecto de Aboño, EDP impulsa otra gran inversión para Soto de Ribera y un parque eólico marino flotante de 50 megavatios frente al litoral de Gijón que suministrará energía verde a Aboño.
