Le pido al Gobierno entrante la modificación de la ley de Turismo (7/2001), así como el decreto relativo a los guías de turismo (59/2007). Las nuevas normativas deberían tener en cuenta los nuevos tipos de turismo y establecer las competencias y titulaciones necesarias para la interpretación de nuestro patrimonio cultural y natural. Debería igualmente revisarse la actual situación planteada en algunos de nuestros espacios naturales protegidos, que pienso que va en contra de los objetivos primeros para los que fueron creados: preservación de sus valores naturales para uso y disfrute de todos. Considerando el turismo como uno de nuestros principales elementos de dinamización económica, se debería anteponer la regulación frente a la prohibición.
Le pido al que mande