M. S.

El servicio de radioterapia de Jove lleva atendidos unos 300 pacientes oncológicos desde su puesta en marcha. O, lo que es lo mismo, se han realizado del orden de 6.500 sesiones. Tratamientos ahora suministrados por un solo acelerador lineal -se adquirió a la casa americana Varian por 1,3 millones de euros-, aunque está comprometida una segunda máquina.

El refuerzo llegará, posiblemente, en el mes de octubre. La unidad de radioterapia dispone de un espacio de 600 metros cuadrados, donde se habilitaron dos búnkeres, un área de control para los técnicos, una sala de dosimetría, planificación y control de calidad, una sala de curas, una sala de informes, tres consultas, tres salas de espera, cuatro cabinas para pacientes, aseos, área de recepción y almacén. Para su acondicionamiento, el Hospital de Jove asumió una obra presupuestada en 3,6 millones de euros.

Una plantilla de 13 personas asiste a enfermos de Gijón, Villaviciosa y Carreño, los concejos comprendidos en el área V del mapa sanitario asturiano. Al frente de toda esta actividad asistencial está el doctor Germán Juan. Antes de que finalice el año, además de un nuevo acelerador, el Hospital de Jove incorporará un aparato de tomografía nuclear. Este avanzado sistema de radiología, llamado PET, permitirá ganar tiempo en la detección y localización de los tumores. «Un proyecto muy interesante», valora José Luis San Miguel. Será el primer centro de la sanidad pública asturiana que cuente con esta tecnología.