R. GARCÍA

Las aguas de baño de Gijón son «muy buenas», según el estudio de calidad que realiza semanalmente el Ayuntamiento de Gijón desde el pasado 18 de mayo. Todas las playas del concejo tienen esta nota, excepto una zona del arenal de San Lorenzo. Las aguas que se sitúan en torno a la escalera 12 reciben el calificativo de «buenas». «Esta nota se va a mejorar», según la concejala de Medio Ambiente del Ayuntamiento, Dulce Gallego, «cuando se ponga en marcha la nueva depuradora, ya que completaremos de modo satisfactorio el plan de saneamiento de la ciudad».

Los expertos han realizado sus análisis en doce puntos de la bahía gijonesa: en el este y en el oeste de las playas de El Arbeyal y Poniente, en las escaleras 4, 8 y 12 de San Lorenzo y en los arenales de Mayanes, Rinconín, Peñarrubia, Serín y Estaño.

Esta buena situación del agua de la costa lleva repitiéndose, en palabras de la responsable del área de Medio Ambiente, «desde el año 2004», momento en el que el Ayuntamiento consiguió mejorar sus notas en todas las zonas. Gallego valoró ayer estos datos de manera positiva: «Los gijoneses y los turistas pueden bañarse con total tranquilidad». La edil también se mostró satisfecha con la puesta en funcionamiento de los pozos de tormentas: «Hacen que mejore la calidad de las aguas, ya que la lluvia se retiene y luego se va directamente a la depuradora».

Esta buena situación no se va a modificar. Las obras de ampliación del puerto de El Musel «no afectan a la calidad sanitaria de las playas», según la concejala, por lo que no se espera que la calidad de las mismas pueda empeorar en los próximos meses.

Dulce Gallego tampoco teme por el recurso ante el Constitucional que amenazan con interponer los vecinos de la depuradora del este contra la decisión municipal de abrir estas instalaciones: «No van a retrasar las obras», aseguró. «Es una instalación que minimiza cualquier molestia que puedan tener los vecinos, lo hemos dicho muchas veces y lo han acreditado muchos técnicos de reconocido prestigio», insistió Gallego.