R. V.

La nueva ordenanza de mascotas ya está preparada para lograr su aprobación plenaria. Los concejales del PSOE e IU que conforman la Junta de Gobierno daban ayer su aprobación al texto definitivo que será llevado al Pleno del próximo mes por la concejala de Participación Ciudadana y Consumo, Pilar Pintos. Este texto es el resultado de incorporar al documento elaborado por los técnicos municipales una parte de las 157 sugerencias enviadas por propietarios, vecinos y responsables de asociaciones de defensa de los animales al Ayuntamiento a través de la consulta popular realizada en la web municipal. La ordenanza saldrá oficialmente a información pública tras su aprobación en el Pleno para recibir las alegaciones de los ciudadanos.

Entre las modificaciones al texto original incluidas a petición de los vecinos destacan la regulación de la longitud de las correas de los perros para evitar problemas con los nuevos modelos extensibles y la autorización a dar de comer a los gatos en la calle siempre que se mantengan los principios de limpieza e higiene. También se han matizado elementos vinculados a la estancia de las mascotas en los transportes públicos.

Uno de los elementos singulares de la ordenanza, que sustituye a la que está en vigor desde principios de los años noventa del siglo pasado, es la reserva de 45 áreas repartidas por toda la ciudad para dejar sueltos a los perros. Para habilitar esas zonas se ha iniciado un proceso de contratación de material y señalizaciones que tiene un coste de 120.576 euros. Cada una de las zonas incluirá paneles informativos con planos y datos concretos sobre el control de las mascotas extraídos de la nueva ordenanza. Además, y en todas y cada una de las zonas habilitadas, habrá una fuente para servicio de los perros.