En la jornada de conmemoración, que sirvió para hacer un repaso del trabajo y la actualidad en torno al cáncer de mama por especialidades -incluida la atención primaria-, no faltó la invitación a la alcaldesa, Carmen Moriyón, en calidad de regidora local y, sobre todo, de "miembro destacado de esta unidad de Cabueñes". De hecho, fue Moriyón la primera coordinadora y una de las personas que con más determinación reclamaron la creación del grupo de trabajo, así como inversiones y nuevas técnicas para desarrollar en el área de la mama.
Moriyón estuvo acompañada en el acto del concejal Fernando Couto y afirmó que "su presencia no es casual", ya que quería comunicar al Hospital que el Ayuntamiento -por acuerdo de cinco grupos municipales menos el PP- había aprobado todos los expedientes urbanísticos que propiciarán la reforma integral de Cabueñes. "La ampliación se necesita para seguir dando un buen tratamiento a nuestras pacientes", declaró la Alcaldesa. Antes, Moriyón hizo un pormenorizado repaso de los nombres de quienes dieron impulso hace diez años a la unidad de mama de Cabueñes, que lleva el nombre del pionero de la cirugía conservadora, el italiano Bruno Salvadori. "La clave de esta unidad fue el equipo, las personas que ya veníamos haciendo una labor con los casos de cáncer de mama, y que decidimos unirnos para trabajar todos pensando en esa única persona que es cada paciente", explicó.
También rememoró la osadía con la que, un día, decidieron que "queríamos buscar al líder que nos inspirara" en esos nuevos abordajes del cáncer de mama, y llegaron hasta Bruno Salvadori, la persona "que demostró al mundo que no siempre hacía falta quitar la mama completa para garantizar la misma superviviencia". Emocionada, Carmen Moriyón reconoció que "me acuerdo mucho de esta unidad sobre todo cuando las señoras me dicen por la calle lo bien que les va". La regidora instó al equipo a "no dejar de pedir el apoyo institucional, ni dejéis de ser exigentes en los medios materiales que se necesiten. Toca, después de diez años, seguir en una etapa expansiva liderando el tratamiento del cáncer de mama".
Por su parte el gerente del área V, Miguel Rodríguez, reconocidó que "esta unidad es un ejemplo de cómo se trabaja en la medicina moderna. Abordando cada caso en un comité clínico multidisciplinar y ofreciendo a cada paciente el tratamiento más ajustado" frente a "una lacra como es este cáncer, el más mortífero en las mujeres del mundo entre los 20 y los 59 años". El gerente del Sespa, José Ramón Riera, también alabó la trayectoria de "una de las unidades clínicas multidisciplinares que mejor funciona", al tiempo que pedía a los profesionales que "ejerzáis el liderazgo, como ocurrió para sacar adelante esta unidad, porque es con emoción como se consiguen los éxitos".
