A lo largo del día de hoy se procederá a la instalación de un "osito" monumental en la plazuela San Miguel que viene a sustituir al Papá Noel gigante que fue trasladado recientemente a la plaza del Seis de agosto.

El nuevo adorno navideño, de cinco metros de altura, podría ser interactivo para que los niños puedan jugar con él, dado que en principio cuenta con esa posibilidad, aunque el gobierno local tiene dudas sobre si instalar o no los controles electrónicos. Si deciden ponerlos, los niños podrán "jugar" con el gran oso a través de un panel que permitirá la interactuación mediante tres botones. Uno de los botones ofrece una sorpresa, otro permite iluminar un corazón y el último hace sonar música.