"Es tanto lo que hacemos que a veces puede que abarquemos demasiado". La Compañía de Jesús desempeña desde hace años numerosas labores en la ciudad a través de sus centros como el colegio Inmaculada Concepción, el Revillagigedo o el Hogar San José, que celebra este 2017 sus 75 años. Ahora, además está de enhorabuena después de que el Gobierno local, Foro Asturias, les propusiese como medalla de oro de la ciudad por sus 125 años de acción social en Gijón. Un premio "merecido" a ojos de los jesuitas que viene a confirmar que "algo bien hemos hecho" en todo este tiempo.

De entre todos sus proyectos en marcha destaca la rehabilitación de la ermita de San Esteban del Mar, en El Natahoyo, que con ayuda de los Rotarios se convertirá en un espacio cultural y de exposiciones que repercutirá en la ciudad. También trabajan en el proyecto "Hospitalidad.es", a nivel global, y que en Gijón será un punto de encuentro para el apoyo y acompañamiento a personas migrantes de la ciudad y en la que se espera la implicación de toda la comunidad jesuítica.

El jesuita Inocencio Martín Vicente, coordinador de los trabajos de la Compañía de Jesús en Asturias, confirma en entrevista con LA NUEVA ESPAÑA que trabajan por la devolución a la Iglesiona del Sagrario y el Cristo de la Paz que ahora se encuentran en Burgos que han demandado numerosos feligreses. "Va por buen camino", explica Martín Vicente que también desvela la posibilidad de dejar la parroquia de la Inmaculada "al adolecer de escasez de jesuitas".