Usuarios habituales del servicio de autobuses del Consorcio de Transportes de Asturias (CTA) se vieron afectados en la mañana de ayer en la línea entre Gijón y Oviedo por un retraso de más de media hora que, según denuncian, "es algo habitual". El Grupo Parlamentario de Ciudadanos en la Junta General del Principado ha sido el altavoz de esta queja. "Voy todos los días a Oviedo en la CTA y tengo muy comprobado, porque además la gente lo cuenta y comenta, que esto es un descontrol y un caos", explica el diputado Armando Fernández Bartolomé, que asegura que lo de ayer "ya fue de película" al estar esperando desde las 8.10 en que estaba prevista la salida del autobús hasta las 8.45 que pasó el primer vehículo.

Además del trastorno que genera a los usuarios, el diputado regional teme que este "caos" perjudique el uso del transporte público. "Debería afinar más porque esto disuade a la gente de coger el transporte público", explica Fernández Bartolomé, poniendo como ejemplo que "si uno entra trabajar a una hora y ve que llega siempre tarde en autobús, es lógico que acabe utilizando el coche particular".

Este problema, explica, se acrecienta en fechas puntuales como el inicio del curso académico o, por ejemplo, ahora en San Mateo. "Es un problema de previsión; siempre que empiezan las clases en la Universidad se produce este descontrol", lamenta el diputado de la formación naranja, que exige soluciones y una mayor eficacia del servicio. "Siempre les pilla con el pie cambiado", lamenta.