Para el doctor Genaro Alonso Megido, consejero de Educación y Cultura del Principado, la locura es uno de los temas centrales del "Quijote", la obra más universal de la literatura española. Por eso, quizás, eligió ayer un asunto que viene siendo debatido ampliamente a lo largo de las últimas tres centurias para la conferencia que pronunció invitado por la Fundación Cervantista Álvarez Viña. Y de ahí, también, el título de su ponencia: "Variaciones sobre la locura de don Quijote". Y la conclusión a la que llegó después de seguir, durante tres cuartos de hora, la pista del trastorno del principal personaje de Cervantes a lo largo de las dos partes de la obra: "Es una locura libresca, literaria, ceñida al mundo de la caballería andante".

Filólogo, catedrático de Instituto e inspector de Educación antes de ser nombrado Consejero en el último Gobierno de Javier Fernández, Genaro Alonso se mostró ayer como un atento lector del "Quijote". En su opinión, hay que dar por buena la explicación que da el mismo Cervantes sobre la causa del trastorno de su criatura: se le secó el cerebro como consecuencia de sus muchas lecturas de los libros de caballerías, de la falta de sueño, del agotamiento. Para el conferenciante, el bueno de Alonso Quijano creyó "erróneamente" que los contenidos de sus lecturas eran "verdad histórica". Y más: "que en el siglo XVI era posible resucitar la vida caballeresca medieval".

Genaro Alonso hizo un análisis diacrónico del desarrollo de la locura de don Quijote: desde su primera salida hasta el regreso a su aldea, cuando recupera el juicio y muere. Y cómo ese trastorno ha sido interpretado de distinta manera desde el siglo XVIII hasta ahora mismo, conforme los cambios y teorías de las ciencia médica. ¿Delirio? ¿Trastorno de la personalidad como consecuencia de una aguda avitamonisis o del pertinaz insomnio por la abundancia de lecturas? ¿El comportamiento debido a una profunda alteración melancólica?

"Lo que está claro es que el deterioro de la personalidad no parece deberse a una vida desordenada", indicó el Consejero, en coherencia con las explicaciones que da el mismo Cervantes. Insistió en su tesis: "Don Quijote padece un trastorno de la personalidad debido a la literatura de caballerías". Una opinión que no se aleja un milímetro de lo que dice la voz que narra la historia.

Genaro Alonso describió cómo va manifestándose ese trastorno en los tres viajes del Quijote por la Mancha, Aragón y Cataluña. Primero, acomoda la realidad a su fantasía; al final del libro, es la mostrenca realidad la que se impone y mata finalmente al personaje. "La creación caballeresca de don Quijote se va desmoronando". ¿Es la liberación de su locura la que abre, paradójicamente, la puerta de la muerte?

Genaro Alonso fue presentado por la directora general de Universidades del Principado, Cristina Valdés: "Una persona hecha a sí misma que defiende el valor de la educación". La Fundación Cervantista Álvarez Viña, que preside Jesús Menéndez Peláez, tiene como objetivo preservar el legado del fallecido empresario gijonés.