El principal sospechoso de la violación perpetrada el pasado lunes en la senda fluvial, J. M. S. D., fue detenido en la mañana del sábado por agentes de la Policía Nacional, que le interceptaron en la calle Cataluña tras varios días de búsqueda. Apenas dos horas después, y con el detenido presente, se procedió al registro del domicilio en el que vivía con sus padres, ubicado en el barrio de El Coto, y que el mismo detenido autorizó.
El registro tuvo lugar a primera hora de la tarde de ayer. Las labores estaban enfocadas en encontrar alguna pista que confirmase su presencia en la senda fluvial del parque de Viesques la mañana en la tuvo lugar la agresión sexual a la mujer de 40 años.
Los investigadores buscaron en su habitación y armarios con la intención de encontrar la ropa que vestía el día que supuestamente violó a su víctima y también el pasamontañas con el que se tapó la cara para evitar que la mujer le identificase después de la agresión.
Los agentes trataban de encontrar las prendas que permitiesen cotejar las pruebas obtenidas en el parque fluvial. Es por ello que, como sacaron huellas de la escena, buscaron entre sus zapatos y playeros alguna coincidencia con las muestras tomadas en la zona. También buscaron el cuchillo con el que amenazó e intimidó supuestamente a su víctima para lograr apartarla del camino por el que corría y consumar así su agresión sin encontrar resistencia alguna.
Fuera de casa
Las pruebas recogidas en el domicilio del barrio de El Coto fueron trasladadas a dependencias policiales para que sean examinadas por los agentes de la Policía Científica, claves en esta investigación que se ha resuelto con gran rapidez pese a los escasos datos que manejaban.
Los agentes buscarán ahora coincidencias, restos de ADN de la víctima en las ropas a ver si arrojan un resultado positivo como el que permitió arrestar ayer a este presunto violador que ya había sido condenado en el pasado por los mismos delitos.
El acusado de la agresión sexual, que se investiga si estuvo siguiendo los movimientos y rutina de su última víctima, no solo huyó del lugar el lunes, también dejó de ir por casa desde el pasado lunes. Es por ello que es factible que se hubiese deshecho ya de cualquier prueba que pudiera incriminarle, o de cualquier prenda que su víctima pudiese reconocer aunque estuviese la zona con escasa luz. No obstante, le detuvieron con varias prendas que llevaba en bolsas.
