La Cámara de Comercio de Gijón inauguró ayer su nuevo cierre perimetral, una estructura de acero de 220 metros lineales que ha supuesto una inversión de medio millón de euros y que ha sido posible por la contribución de 16 empresas y tres profesionales, que han aportado sus servicios y materiales para ejecutar esta obra.
"Si no fuera de esta manera, habría que haber hecho un cierre mucho más sencillo, porque no hay medios", señaló ayer el presidente de la Cámara de Comercio, Félix Baragaño tras el descubrimiento de una placa a la entrada de la Cámara de Comercio en la que se reconoce el apoyo de las empresas y profesionales que contribuyeron a una obra "con el objeto de aportar a la ciudad de Gijón un elemento singular" para "dignificarla y embellecerla".
El diseño de este cierre perimetral corrió a cargo del arquitecto Jovino Martínez Sierra, quien destacó que buscó "no hacer un cierre aburrido y repetitivo", procurando darle transparencia y dinamismo.
El concejal de urbanismo, José Luis Fernández, destacó la colaboración, como la que se ha dado en este proyecto, "es clave para alcanzar el éxito". Una colaboración entre la Cámara y empresas de las que Baragaño se mostró "orgullosísimo".
