La contaminación por benceno, un compuesto cancerígeno, se disparó esta mañana en parte de la zona oeste de Gijón, tal como quedó reflejado en el pico de este contaminante que registró la unidad móvil de medición del Ayuntamiento estacionada en El Lauredal. El nivel de benceno en el aire registrado a esa hora en la urbanización fue de 24,6 microgramos por metro cúbico de aire. La Coordinadora Ecologista de Asturias recuerda que el valor de referencia anual en las guías de la Organización Mundial de la Salud (OMS) está en 1,7 microgramos por metro cúbico de aire de media anual, mientras que "la tolerante normativa española está en 5 microgramos de media anual".