Un joven de 15 años que circulaba en un patinete eléctrico por la calle Río Nalón resultó ayer gravemente herido tras ser atropellado por un vehículo que transitaba por la carretera del Obispo en dirección hacia Pumarín. El accidente se produjo pasadas las 14.45 horas y, a consecuencia del impacto, el chico sufrió un severo golpe en la cabeza. Fue evacuado de urgencia en ambulancia al Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), donde ingresó en la Unidad de Cuidados Intensivos con pronóstico reservado. Según fuentes municipales, el accidente se produjo supuestamente porque el joven habría rebasado un semáforo cuando aún estaba en rojo antes de llegar al cruce. "El impacto fue muy grande", aseguran los testigos.
La Policía Local se ha hecho cargo de la investigación y los agentes tratan de determinar por dónde circulaba exactamente el joven. Según fuentes municipales, se quiere determinar si iba o no por el carril bici de la calle Río Nalón. Este carril bici tiene un paso de cebra y un semáforo antes de llegar a la intersección con la carretera del Obispo. Después prosigue por la acera de la calle Río Nalón. El accidente se produjo en el cruce entre estas dos vías. Las primeras pesquisas indican que el joven se había saltado un semáforo en rojo mientras circulaba en su vehículo de movilidad personal justo cuando los coches tenían el paso habilitado por un semáforo en verde.
Según apuntaron los testigos del accidente, el herido salió despedido algunos metros y terminó tendido en la propia calzada de la carretera del Obispo, justo al pie de varias tapas de alcantarilla que hay en ese lugar, cerca del citado carril bici. "Iba a buscar a los niños al colegio cuando de pronto escuché un golpe muy fuerte. Me giré y vi al crío volar por los aires", explicó una de las mujeres que presenció lo sucedido. "Fui para él y llamé a la ambulancia. Estaba todo el mundo muy nervioso", detalló esta misma persona. "Por lo que contaban algunas personas, le había cogido prestado el patinete a otro amigo. Ojalá que pueda salir para adelante", finalizó la mujer.
En el lugar de los hechos se personaron varios agentes de la Policía Local para tomar medidas sobre el terreno y así poder esclarecer las causas del siniestro. El conductor implicado en el accidente se quedó en todo momento en el lugar de los hechos hasta que fue trasladado a comisaría en un coche patrulla de la Policía Local. Aunque el Ayuntamiento no ofreció información sobre ello, el conductor, un hombre de mediana edad, estaba en aparente buen estado. Se podía apreciar en su rostro y en su tono de voz un claro nerviosismo y preocupación por el accidente.
El suceso causó también un fuerte impacto en el colegio en el que estudia el joven, que cursa cuarto de la ESO. Según las fuentes consultadas, por la zona pasó una compañera suya de clase que iba en el coche con sus padres después de haber terminado la jornada escolar. Habría sido esta familia la que se puso en contacto con el centro escolar para tratar de localizar a los padres del menor. La dirección se implicó para localizar a los progenitores, que rápidamente pusieron rumbo al principal centro sanitario de Asturias para estar al lado de su hijo.
El colegio donde estudia el joven permaneció hasta la última hora de la noche de ayer en vilo, pendientes de la evolución del adolescente. Las fuentes consultadas explicaron que su estado era "muy grave". Otras fuentes sanitarias apuntaron a este periódico que permanecía ayer ingresado en la UCI y que estaba consciente, con vigilancia continua por parte de los médicos, muy pendientes ante cualquier cambio que pudiera producirse.
