El auge de los pisos de lujo en centro de Gijón despierta el interés de inversores latinoamericanos

Los expertos explican que el cliente tipo tiene raíces asturianas y alto poder adquisitivo: "Es un perfil que no teníamos y se empieza a notar"

Recreación de la promoción en torno al palacete de la calle San Bernardo.

Recreación de la promoción en torno al palacete de la calle San Bernardo. / Marcos León

Pablo Palomo

Pablo Palomo

El auge de los pisos de lujo en la zona centro de Gijón ha despertado el interés de los inversores latinoamericanos, especialmente de México, en la ciudad. En ciernes hay ahora mismo varias promociones, como es el caso de la renovación del palacete de la calle San Bernardo o el histórico edificio de la calle Covadonga al pie de la plaza de Los Campinos, que han suscitado ya no pocas llamadas de este tipo de clientes, con un poder adquisitivo muy alto, para preguntar precios y condiciones. Así lo reconocen tanto arquitectos, promotores inmobiliarios o los constructores que han mantenido conversaciones con esta clase de compradores, que se fijan en Asturias y en Gijón en concreto al tener muchas veces raíces en el Principado. Lo hacen como inversión, o como vía para que su descendencia pueda estudiar en España. «Hay un interés real y creciente», explican los conocedores de esta nueva realidad, que comienza a conjugarse con el incremento de la compra de pisos de segunda mano por parte sobre todo de madrileños o gente del sur de España que ven a Asturias como un lugar ideal de vacaciones o jubilación.

Así lo cuenta, por ejemplo, la arquitecta Verónica Durán, que constata este interés creciente de ciudadanos de países latinoamericanos que ponen sus ojos en Gijón. Muchos de ellos, explica, tienen raíces asturianas, pero «también van apareciendo casos de personas de México, Venezuela o República Dominicana que no tienen nada que ver con Asturias». «El factor clima está claro que ha traspasado fronteras y ese es nuestro gran valor. Para ellos, que llueva es muy distinto. Ahora existe un interés de inversores para apostar aquí, en actividades específicas, como deportivas y náuticas», señala Durán. La arquitecta gijonesa considera, además, que se debe aprovechar «todo el potencial» que tiene tanto Gijón como el resto de Asturias, aunque advierte que esta nueva tendencia, en consecuencia, implicará «una subida de los precios».

El edificio del número 24 de la calle Covadonga. | Ángel González

El edificio del número 24 de la calle Covadonga. / Ángel González

Una de las nuevas promociones que hay en ciernes de pisos de lujo es la recientemente reactivada para el palacete de la calle San Bernardo, que antaño quiso poner en marcha el empresario asturmexicano Antonio López. Se estima ahora una inversión de 20 millones de euros para construir 28 viviendas libres y locales comerciales. El precio de las viviendas va de los 283.000 euros para las de dos dormitorios y supera por poco el millón para las de cuatro. En la azotea, se plantea un ático con piscina. La hoja de ruta la marca la empresa Gestilar a través de su marca Cooper. El proyecto se gestiona en régimen de cooperativa de tal forma que los compradores sean socios. Se espera que se pueda entrar a vivir en 2026. «Tenemos una lista de 200 interesados de gente de América del Sur y de Madrid», explican fuentes de Copun Consulting Inmobiliaria, que comercializa este bloque. Añaden estas fuentes que los interesados son de Santo Domingo, la capital de República Dominicana, y también de México. «Nos está entrando también cliente inglés», apostillan.

La venta de vivienda de segunda mano sigue impulsada por madrileños y andaluces

Muy cerca del número 26 de la calle San Bernardo, que es donde se encuentra el palacete que lleva la firma del arquitecto Manuel del Busto, en la calle Covadonga, en el entronque con San Bernardo, hay proyectada otra promoción de pisos de lujo. En este caso ha sido la compañía Grupo Horizonte la que se ha hecho con este histórico bloque. Su compromiso es respetar la vigencia de los contratos de alquiler del inmueble, por esa razón no hay una fecha estimada para el arranque de una obra que plantea un proyecto de rehabilitación integral al detalle respetando la esencia histórica de este edificio situado en el número 24. La idea es conseguir ocho viviendas de lujo. En este caso, también ha habido interés por parte de inversores de Latinoamérica. «Hemos tenido mucha petición de información, pero vamos a mantener los contratos que existen», reconoce Diego Baeza, quien sigue la línea de sus compañeros.

«Estas peticiones nos sirven para tener conocimiento de lo que se está reclamando. En Gijón –este tipo de inversores– se está notando y cada vez es más tangible», asegura Baeza. «Hay un poco de todo, de México, gente que tiene raíces en Asturias o algún tipo de ascendencia aquí», explica el gijonés. «Es un tipo de perfil que en Gijón no teníamos antes y que ahora sí que se está notando que empieza a aparecer», puntualiza. Baeza detalla que se trata de personas con un nivel adquisitivo alto y que ve esta clase de propiedades como una inversión o con el objetivo de que sus hijos puedan venir a estudiar a España. «El perfil de inversor de Latinoamérica es alto», asevera. Otro constructor que ha tenido conversaciones con esta clase de clientes, pero que, precisamente por ellas prefiere no dar su nombre, también atestigua la entrada de inversores mexicanos al parque inmobiliario gijonés y también al asturiano. Este interés se debe también a cuestiones sociológicas como las mayores de garantías de seguridad que ofrece España en comparación con México o la estabilidad política que se estila en esta parte de Europa en comparación con países del entorno de América Latina. Este constructor añade que también se encuentra con muchos madrileños.

Edificio de la calle Marqués de San Esteban en rehabilitación.

Edificio de la calle Marqués de San Esteban en rehabilitación. / LNE

Precisamente, esta clase de clientes de la capital de España son los que están teniendo el común denominador de las inmobiliarias de la ciudad, las que ofrecen viviendas a precios más asequibles. El atractivo turístico de Gijón, sumado al clima más benigno que hay en verano por estas latitudes hace que la ciudad se convierta en un destino cada vez más atractivo para vecinos del centro del país y también del sur. De hecho, gracias a esta clase de compradores la compra de vivienda de segunda mano se disparó un 30 por ciento en Gijón a finales del verano pasado. Esto lo constatan expertas en el sector como Oliva Fra, cuya inmobiliaria lleva su nombre. «En nuestro caso los movimientos más significativos del primer trimestre está siendo de gente de Madrid y del sur. Se debe en parte también a que Asturias tiene unos precios más asequibles en comparación con Cantabria y el País Vasco», explica. Fra detalla que muchos de estos compradores adquieren la vivienda como piso de vacaciones, pero también con vistas a pasar los años de su jubilación. «Después de la pandemia se ha notado un incremento importante. Asturias puede ser como un nuevo Benidorm, pero más fresquito», finaliza Oliva Fra.

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