Identificados varios implicados en la reyerta ultra en pleno centro de Gijón: lo que se sabe de los hechos

Avances importantes en la investigación de la reyerta que sacudió el centro de Gijón la noche del 17 de febrero, y que enfrentó a un grupo de extrema izquierda vinculado a la hinchada del Ceares con seguidores del Sporting habituales del fondo sur de El Molinón, relacionado con la ideología contraria. La Policía Nacional ha estrechado el cerco sobre los implicados y ya ha tomado declaración a varios de ellos por lo sucedido en la Ruta de los Vinos. Entre los que han dado su versión se encuentra un conocido futbolista asturiano que declaró, según confirmaron varias fuentes, en calidad de testigo. Las pesquisas policiales se encuentran muy avanzadas y se han acelerado después de que uno de los implicados, el que resultó peor parado por la pelea, presentara su denuncia en los últimos días. La trifulca duró apenas unos minutos, pero se saldó con varios heridos y botellas y sillas y mesas volando por los aires ante decenas de testigos.

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Según la versión del denunciante, este, que es de los vinculados al fondo sur del coliseo rojiblanco, se encontraba en una terraza de un conocido local hostelero en la calle Begoña, al pie de la plaza Monte de Piedad, junto a su novia. Hacia las diez de la noche fue identificado en el lugar, siempre según su versión, por varios jóvenes vinculados a la extrema izquierda, tras lo cual se abalanzaron sobre él para agredirle. A continuación, otros compañeros de grada del primer agredido, que estaban en la zona celebrando un cumpleaños, decidieron intervenir al ver cómo lo golpeaban. Se originó entonces una fortísima reyerta que duró cuestión de minutos.

La pelea fue rápida, pero generó un enorme revuelo. Obligó a movilizar, al menos, a siete patrullas de la Policía Nacional y a varias de la Policía Local. Los implicados se desenvolvieron con violencia y se investiga si, tras el choque, hubo cuestiones ideológicas. Llegaron a tomar sillas y mesas y lanzárselas unos contra otros. Uno de los implicados llegó a caer al suelo y fue, explicaron los que lo vieron, apaleado por otros varios, lo cual casaría con la versión del denunciante. Después, llegaron a lanzar botellas vacías unos contra a otros e incluso a tomar cascotes vacíos para, tras romperlos, intentar emplearlos.

La pelea se saldó con varios heridos, pero todos de carácter leve. Tal y como detallaron los testigos, nada más escuchar las sirenas de las patrullas, todos ellos escaparon del lugar de los hechos a la carrera. Unos se fueron hacia la zona de la plaza del Marqués y otros en dirección a la calle Santa Rosa. La normalidad en la zona, tras la pelea, que tuvo lugar pasadas las diez de la noche, se recuperó poco después. Eso sí, como rastro quedaron decenas de cristales rotos sobre el suelo que los camareros de los locales cercanos tuvieron que recoger, y también un pañuelo de papel empapado en sangre. Como consecuencia de lo sucedido también se registraron daños en la terraza en la que inicialmente se encontraba el joven denunciante con su pareja. Se fracturó el cristal de una de las protecciones laterales.