Los remates de Pablo Iglesias se prolongarán durante cuatro semanas

El Ayuntamiento prevé recepcionar los trabajos el jueves, por lo que la penalización a la adjudicataria rondará los 4.000 euros

Obra de la avenida de Pablo Iglesias.

Obra de la avenida de Pablo Iglesias. / LNE

R. V.

Cuatro semanas. Ese es el plazo que estima el Ayuntamiento que durarán los últimos remates de la obra de Pablo Iglesias. La previsión del gobierno local tras las conversaciones mantenidas con la adjudicataria es que el Consistorio recepcione los trabajos, que tenían este miércoles como fecha límite para su finalización, el jueves. Luego técnicos municipales evaluarán los trabajos y transmitirán a la empresa que desarrolla la reforma aquellos desperfectos para que los subsanen en un plazo que, se estima, no sobrepase el mes.

El retraso tendrá un coste para la empresa adjudicataria de la obra, tal y como ya había advertido el Ayuntamiento. Será penalizada con 615 euros por día de demora que, nuevamente según los cálculos municipales, no sobrepasará el jueves de la próxima semana. El gobierno local anunció en su momento que la idea era que esas "multas" se utilizasen para resarcir a los comerciantes que padecen los retrasos en las vías públicas. Si bien, fuentes consultadas señalan que aún no hay una decisión tomada sobre qué se hará con el dinero de las penalizaciones de Pablo Iglesias, ya que se estima que rondarán los 4.300 euros.

Este miércoles fuentes de la empresa adjudicataria defendieron a través de este periódico que los retrasos en las obras se debieron, en parte, a la tardanza de otras empresas en ejecutar trabajos en las traídas de agua o la red eléctrica indispensables para llevar a cabo la remodelación de Pablo Iglesias. Citaron, entre otras, a la Empresa Municipal de Aguas (EMA). Asimismo, desde la compañía también señalaron su malestar con el Ayuntamiento por las críticas públicas sobre su trabajo. "El distinto trato del Ayuntamiento con nosotros respecto a otras empresas ha sido innegable", afearon.

Pablo Iglesias fue una de las obras que enumeró ayer el edil socialista José Ramón Tuero al hablar de problemas en la ejecución de trabajos en la calle. A ella sumó las incidencias en Río Eo, Cataluña o la ecomanzana de La Calzada y la acusación al actual equipo de gobierno de "falta de control y de vigilancia". Tuero indicó que Carmen Moriyón y su equipo son "especialistas en echar balones fuera. Son el gobierno de las excusas. O es culpa de la empresa, del proyecto o del tiempo. Ellos son los responsables, que dejen de culpar a los demás".