Emulsa ingresa un millón "extra" tras la primera fase de revisión de sus facturas

La empresa encara ahora posibles ajustes en el cobro a pisos turísticos, terrazas hosteleras o grandes instalaciones en base al pago por generación

Dos contenedores de basura de Emulsa instalados en la calle José Manuel Palacio.

Dos contenedores de basura de Emulsa instalados en la calle José Manuel Palacio. / LNE

La regularización de la facturación por la recogida de la basura fue una de las medidas que anunciara el edil popular Rodrigo Pintueles al llegar a la presidencia de la Empresa Municipal de Servicios de Medio Ambiente (Emulsa) ante la delicada situación económica de la entidad. Una medida que se sumaba al incremento de las aportaciones del Ayuntamiento como socio único y a esa subida del 30% en los recibos a todos los consumidores que se hizo efectiva el pasado enero. Y una medida que tenía como base la denuncia de quien entonces era el gerente de Emulsa –cesado en enero– sobre la pérdida de ingresos que suponía la existencia de facturas mal cobradas o impagadas.

Ese proceso de revisión de las bases de datos de facturación ya ha concretado su primera fase y el resultado supone para Emulsa un incremento anual de su recaudación en un millón de euros. Hasta el momento se han revisado bases de datos que tienen que ver con entidades bancarias, residencias de mayores e instalaciones de administraciones públicas (incluidas algunas municipal es), por poner algunos ejemplos. Y los cambios en su factura se han hecho al detectar desajustes en cuanto a la superficie en base a la que pagan. No hay que olvidar que el recibo de la basura es el resultado de dos sumandos: el primero deducido de una cuota base y en función de la actividad que se desarrolla y el segundo en función de la superficie total del local.

Precisamente la relevancia que los metros cuadrados deban tener es un elemento sobre el que ahora mismo hay un debate abierto en Emulsa. Se entiende desde el nuevo equipo directivo que no se puede establecer una relación directa entre superficie y generación de residuos. O por lo menos no sin tener en cuanta también la cantidad, y el tipo, de residuos que generan. E, incluso, el impacto social de su actividad. Un debate al que hay que dar una respuesta política y que, a no mucho tardar, se abrirá al consejo de administración de la empresa.

En ese proceso de regularización de sus facturas Emulsa tiene que encarar epígrafes que tienen su complicación. Por ejemplo, el tratamiento que se da a los pisos turísticos. A falta de una legislación consolidada, Emulsa ha recopilado varias sentencias falladas en contra de haberlos sacado del epígrafe de consumidores domésticos para aplicarles la tarifa de hoteles. Un mal antecedente. Aunque por otro lado, la subida de impuestos y tasas fue uno de los compromisos del actual gobierno municipal para limitar el crecimiento de los pisos turísticos en la ciudad.

En los ámbitos aún pendientes de revisar por Emulsa están también los establecimientos hosteleros con terrazas, los grandes productores –donde están todos los centros comerciales y cadenas de supermercados–, los polígonos industriales y las instalaciones de tipo industrial. Todas ellos con sus peculiaridades en lo que tiene que ver con los residuos que generan y la normativa legal que se les aplica. Por ejemplo, los residuos industriales o especiales no pueden ser recogidos por Emulsa, con lo que se les tendría que cobrar por otro tipo de basuras, como el papel, y en el caso de los grandes generadores tienen la opción de gestionar sus residuos a través de gestores autorizados.

Un 0,5% no cobrado

Al tiempo que se avanza en la revisión de la facturación para ver qué criterios se aplican a futuro, Emulsa ha analizado el impacto real de lo que se ha dejado de cobrar por impagos o esa mal facturación. Los números son muy grandes, pero el impacto no es tanto. El estudio se ha centrado en el ámbito temporal que va de 2007 a 2022, ya que el año pasado aún no se ha podido incorporar. En número de facturas, no se cobraron 69.542 sobre un total de 4.640.052, lo que supone el 1,5%. Y en dinero, ese porcentaje baja al 0,51% al poner en relación 997.426 euros no cobrado con un total facturado de 196.238.569 euros. Para la dirección de Emulsa se puede dar la consideración de éxito a haber facturado el 99,5%, ya que supone un nivel de ejecución que está muy por encima del de otras empresas y entidades de todo tipo.

Del estudio en marcha también ha salido la decisión de no reclamar el IVA de los denominados incobrables. Solo se podría ir contra los deudores de los últimos cinco años, al estar prescritos los anteriores, y el coste de la gestión de la reclamación se ha calculado superior al ingreso que se estimaba recuperar.

A la hora de analizar los procesos de facturación por la recogida municipal de basuras hay que tener en cuenta dos cosas. Una de forma y otra de fondo. La de forma tiene que ver con el hecho de que, desde 2004 y en virtud de un convenio de colaboración entre las dos empresas municipales, el cobro de la recogida de residuos sólidos urbanos se incluye en los recibos que emite la Empresa Municipal de Aguas (EMA). Al trabajo coordinado de ambas entidades toca actualizar los datos de los usuarios y el correcto encuadre en el epígrafe correspondiente de pago. Emulsa tiene desde 2019 un responsable de tasas para profundizar en esa labor.

En cuanto a la cuestión de fondo, la referencia está en la ley de residuos y suelos contaminados para una economía circular aprobada en abril de 2022 y donde se fija la obligación de establecer, en tres años como máximo, una tasa "diferenciada y no deficitaria que permita implantar sistema de pago por generación y que refleje el coste real de las operaciones de recogida, transporte y tratamiento" de los residuos. Eso marca todo lo que se vaya a hacer a partir de 2025 en Emulsa y lo que toque pagar a cada uno, premiando a quienes asumen un mayor compromiso con el reciclaje. El espíritu de la ley no cuadra con ese criterio actual de basar la facturación en los metros cuadrados de los establecimientos a los que se aplica. Otra razón para impulsar una revisión en profundidad.

Millones de facturas

  • Dinero (2007-2022). Total facturado. 196.238.569 euros. No cobrado: 997.426. Porcentaje de lo que no cobrado: 0,51%. Son los datos de un informe de control de ese periodo de facturación elaborado por Emulsa. No se incluyó 2023 al no estar cerrado aún el ejercicio.
  • Facturas (2007-2022). Total de facturas emitidas: 4.640.052. No cobradas: 69.542. Porcentaje de lo no cobrado: 1,50%. D
  • Forma de pago. Las cuotas se devengarán por meses vencidos incorporando el importe de las mismas al recibo del consumo de agua correspondiente al domicilio o establecimiento a que se refieran.
  • Prestación. La prestación por el servicio de recogida de residuos se compone de dos sumandos. El primero deducido de una cuota base y en función de la actividad que se desarrolla y el segundo en función de la superficie total del local. El primer componente de la prestación se calcula multiplicando la cuota base a aplicar por un coeficiente en función, de la actividad desarrollada y, a falta de estos datos, el diámetro del contador del servicio de agua. Para el cálculo del segundo componente se aplican valores que tienen que ver con los metros cuadrados de superficie, de acuerdo a una escala que cada año se recoge en el documento de ordenanzas fiscales. Para este 2004 es de 0 euros para los primeros 100 metros cuadrados, 0,06 euros por metro cuadrado y bimestre de 101 a 1.000 metros cuadrados, 0,05 euros de 1.001 a 3.000 y de 0,04 euros a partir de 3.001 metros cuadrados. 
  • Grandes productores. Son aquellos que tienen un contenedor de uso exclusivo o una producción superior a los 500 litros diarios. En estos casos la facturación es en función del servicio y no de los metros cuadrados. 

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