El pasado martes fallecía Jorge Cabeza Embil, que fuera director de la emisora en Gijón de Radio Nacional de España. Lo fue desde que, en la época de Pilar Miró como máxima responsable del ente RTVE se fusionaran la antigua Radio Cadena Española y Radio Nacional de España. Aquello fue en 1988 y, para dirigir la emisora gijonesa llegó desde Oviedo un realizador, Jorge Cabeza. Su conocimiento del medio y profesionalidad, su discreción y su buen carácter pronto le hicieron ser querido y respetado por todos los compañeros, tanto de su emisora, como del resto del ámbito informativo de la ciudad.
Jorge Cabeza fue un hombre de radio. No procedía del ámbito periodístico, sino del técnico. Sus comienzos fueron al lado del cristal que no se oye, como técnico de control en la cabina de control. Allí forjó su oficio hasta llegar a realizador, en la emisora pública de RNE en Oviedo. Y de allí, a Gijón como director, durante los años noventa del pasado siglo, hasta que con sólo 58 años le llegó la prejubilación en uno de esos ajustes a los que el ente radiotelevisivo público nos tiene acostumbrados.
Jorge Cabeza, natural de Moreda de Aller, tenía siempre una sonrisa alegre para todos e infundía tranquilidad, aún en momentos difíciles. Se nos fue con 68 años, tras un incidente vascular que le tuvo hospitalizado sus últimos días y del que no se pudo reponer, hasta este tan definitivo desenlace, que ha dejado sumidos en la tristeza a todos cuantos le conocían y compartieron con él trabajo y momentos de asueto, aficionado a la práctica del deporte, en los últimos años, tras su jubilación. Hace dos años perdió a su hija Beatriz, lo que produjo en él una tristeza que sus amigos percibían. Desde aquí, queremos hacer llegar nuestras condolencias tanto a su esposa, Teresa y a su hijo Jorge, como al resto de su familia. Hoy, a la una y media de la tarde tendrá lugar su funeral en la parroquia de San Lorenzo. Descanse en paz.
