Jesús Iglesias anuncia el cierre de Villagrás, la excelsa cafetería de la calle de Langreo de Gijón. El local, con 45 años de historia, propiedad primero de la familia Villagrás y después de la familia Iglesias, echará el cierre a finales de septiembre y pasará a manos de nuevos profesionales. El local, según las opiniones más relevantes del gremio gastronómico, albergaba la mejor plancha de Gijón porque Jesús Iglesias había aprendido los secretos de la misma en el ovetense bar Pelayo, una de las grandes escuelas de la cocina asturiana. Y en la mejor plancha se prepara la mejor ventrisca de la ciudad. Lugareños y foráneos, gentes de Asturias y de otras regiones llegan cada verano en busca del manjar. Buen género y buena plancha, y no hay más secretos. La ciudad pierde uno de sus emblemas porque la propiedad busca nuevos horizontes después de una trayectoria profesional impoluta.
