La recuperación de la cena solidaria de los rotarios tras casi un lustro de parón ha sido si cabe más oportuna por la elección de la Fundación Eduardo Kocina como entidad beneficiaria. Tras esta organización dedicada, entre otros asuntos, a favorecer la integración de personas con discapacidad mediante innovadoras terapias que tienen como protagonistas a los caballos, se encuentra la sensibilidad social del empresario Jesús Kocina, metido de lleno en la radical transformación del Hospital Covadonga, al que está dotando de tecnologías pioneras en Asturias en diferentes especialidades. El sector privado tiene, además del lógico y legítimo derecho a lograr beneficios, una obligación con el entorno que le rodea, causa primera de su razón de ser. Bueno es reconocer a quien predica con el ejemplo.