Amedy Coulibaly, el terrorista que secuestró a más de una decena de rehenes en un supermercado judío de París, dijo haber matado a cuatro de ellos bastante antes de que los policías dieran el asalto, lo abatieran, y se encontraran con que había puesto una trampa con explosivos.

Según el relato que hizo en una comparecencia ante la prensa el fiscal de París, François Molins, Coulibaly había hablado por teléfono con la cadena de televisión "BFM TV" dos horas antes de que el cuerpo de elite de la policía, RAID, diera el asalto, y entonces ya había señalado que había matado a cuatro clientes del súper "Hyper Cacher".

Los agentes, una vez que lo abatieron, hallaron una quincena de bastones de explosivos y un dispositivo de detonación que había preparado para activarlos, destacó Molins.

En espera de que se haga la autopsia a los cuatro rehenes muertos, la hipótesis manejada es que fueron asesinados por el terrorista antes de la operación policial.

El fiscal hizo hincapié en que las investigaciones han permitido confirmar que Coulibaly tenía relación con los dos supuestos autores de la masacre el miércoles del semanario satírico "Charlie Hebdo", los hermanos Said y Chérif Kouachi.

Por una parte, Coulibaly había sido condenado a cinco años de prisión en 2013 (había salido de la cárcel hace pocos meses) por su implicación en un intento fallido para la evasión de un yihadista encarcelado en Francia, en el que también estuvo relacionado uno de los hermanos Kouachi.

Además, la esposa de Chérif Kouachi, interrogada tras el atentado de "Charlie Hebdo", reconoció que su marido conocía a Coulibaly.

Es más, en el control de los teléfonos de unos y otros, se pudo ver que la esposa de Said Kouachi había hecho más de 500 llamadas a la compañera de Coulibaly, Hayat Boumeddien, por la que se ha lanzado una orden de busca y captura.

Según el fiscal, eso muestra los "vínculos constantes y sostenidos entre las dos parejas".

Todos esos vínculos han llevado a unir en la misma investigación terrorista los sumarios abiertos por los hechos que se reprochan a los Kouachi y a Coulibali.