Ucrania acusó ayer a Rusia de "apoyar el terrorismo" ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya. Kiev sostiene que las milicias prorrusas han aumentado los ataques en el este del país, así que pide al tribunal que tome medidas para impedir que Moscú siga financiando a los milicianos de Donetsk y Lugansk.

La viceministra de Exteriores, Olena Zerkal, dijo ante los jueces que los "derechos fundamentales han sido violados por uno de los miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU".

Ucrania sustancia su acusación en dos hechos que da por ciertos: la financiación y el suministro de armas a las milicias de Donetsk y Lugansk y el derribo, en julio de 2014, de un avión de Malaysian Airlines con 298 personas a bordo, en su mayoría holandeses.