Derechos LGTBI

Rusia prohíbe por ley el cambio de sexo

Los que se hayan sometido a estas operaciones tendrán prohibido el acceso a la adopción e incluso podrán ver cómo, en el caso de estar casados, sus matrimonios pueden ser cancelados

Una imagen de las celebraciones del Orgullo.

Una imagen de las celebraciones del Orgullo. / EFE

Àlex Bustos

Repetidamente Vladímir Putin en sus discursos ha criticado como Occidente trata al colectivo LGTBI. Y ese clima también se respira en la Duma rusa, que ha consolidado el giro conservador que está en marcha desde hace años en el país euroasiático aprobando una ley que prohíbe explícitamente los cambios de sexo. Concretamente esta restringe las operaciones de reasignación de sexo, así como impide que alguien que modifique su género legalmente sin una operación.

De acuerdo con la ley, habrá algunas excepciones por razones médicas en las que se permita la intervención médica cuando haya malformaciones genéticas o desajustes hormonales que sí permitirán la operación de los genitales. El portavoz del parlamento Viacheslav Volodin en Telegram apuntó que esta decisión se tomó "para proteger a los ciudadanos y a los niños" y describió el proceso de reasignación de género "el camino hacia la degeneración de la nación". Añadió que esto es "inaceptable" en Rusia. Los activistas pro derechos humanos han advertido que esto incrementará las cirurgías clandestinas y el número de suicidios de personas transexuales.

País conservador

Una vez ratificada por la cámara alta y el presidente ruso Vladímir Putin, que deberá firmar la ley, los que se hayan reasignado el género no podrán adoptar infantes y verán como sus matrimonios pueden ser cancelados si uno de los dos contrayentes se cambió el sexo legalmente.

Los representantes del oficialismo ruso suelen hablar en contra de lo que consideran "valores occidentales", algo que abarca la tolerancia con el colectivo LGTBI, que consideran una ideología extranjera que amenaza lo que ven como "valores tradicionales y espirituales de Rusia". Este punto de vista lo comparte también Putin, que en sus discursos ha apuntado incluso en momentos como la anexión de Jersón, Zaporiya, Donetsk y Lugansk - regiones ucranianas, una anexión no reconocida por la comunidad internacional - ha criticado que en Occidente haya "papá 1 y papá 2" y ha reiterado que Rusia quiere ser más tradicional.

Recientemente, en diciembre de 2022 la misma Duma endureció su llamada "ley contra la propaganda homosexual", algo que limitó todo tipo de contenido audiovisual y escrito en el que aparezcan personajes homosexuales y transexuales, incluso equiparándolo legalmente con la pedofilia. Previamente solo se aplicaba este tipo de medidas en contenido dirigido a menores de edad, hoy en día incluso sugerir en un libro o película que la homosexualidad es algo "aceptable" no está permitido. Cuando se aprobó esta ley contra la llamada "propaganda LGTBI" las editoriales pidieron a muchos escritores contemporáneos rusos que cambios para ajustar sus libros al nuevo marco legal.