Alimentos

El cambio climático pone en riesgo el abastecimiento de verduras al Reino Unido desde España

Esto supondrá un empeoramiento de la dieta de los británicos y una mayor tendencia al consumo de alimentos procesados y más económicos

Puestos de fruta y verdura en el mercado de Convent Garden de Londres, el pasado 9 de marzo.

Puestos de fruta y verdura en el mercado de Convent Garden de Londres, el pasado 9 de marzo. / Reuters

Lucas Font

Los efectos del cambio climático ya se están notando en el abastecimiento de frutas y verduras al Reino Unido. Un informe publicado por la organización Energy and Climate Inteligence Unit (ECIU) ha alertado de que las sequías y los incendios cada vez más recurrentes en los países del sur de Europa están provocando un descenso de la producción y el encarecimiento de muchos alimentos que son importados a diario al país. Este descenso supondrá previsiblemente un empeoramiento de la dieta de los británicos, según el informe, y una mayor tendencia al consumo de alimentos procesados y más económicos.

Más de un cuarto de las importaciones de alimentos del Reino Unido en 2022 procedieron de países del Mediterráneo, con un valor total de 16.000 millones de libras (18.600 millones de euros). Las importaciones desde España representaron un 7% del total y ascendieron a 4.000 millones de libras (4.600 millones de euros), principalmente en productos frescos como frutas y verduras. Un abastecimiento que, según los pronósticos, será cada vez más reducido si no se toman medidas urgentes para combatir los efectos de las alteraciones climáticas.

Alimentos más caros

El informe destaca que algunos alimentos importados, como la coliflor, el brócoli o las fresas, pueden ser cultivados en espacios interiores en el Reino Unido, aunque esta medida supondrá un encarecimiento de los productos debido a un mayor consumo de energía. En otros casos, sin embargo, esta opción ni siquiera es viable. "Hay muchos alimentos que sencillamente no podemos cultivar en el Reino Unido a gran escala", alertan los autores. "Más de la mitad de nuestros limones y pimientos dulces proceden del Mediterráneo, junto con dos tercios de todas nuestras naranjas y el 40% de nuestras uvas de mesa". Otros productos como el tomate o el pepino también dependen en gran parte de las importaciones del sur de Europa.

Roberta Sonnino, experta en sistemas de alimentación sostenible y profesora de la Universidad de Surrey, asegura que las alteraciones climáticas se suman a otros factores que ya han contribuído al imparable aumento del precio de las frutas y de las verduras en el Reino Unido, como la subida de los precios de la energía y el Brexit. "Es una situación muy, muy complicada, que no tiene una solución milagrosa. No vamos a evitar nuestros problemas produciendo alimentos a nivel nacional, ni tampoco los vamos a solucionar dependiendo en exceso de las importaciones", asegura la profesora, quien señala la necesidad de crear unas políticas públicas que den más subsidios para la producción de frutas y verduras.

Familias vulnerables

Esta medida contribuiría a contener la subida de los precios y facilitaría el acceso a estos productos, fundamentales para una dieta saludable, a los sectores más vulnerables de la población. "Una dieta sostenible no existe sin el consumo de frutas y verduras frescas. Si los precios siguen aumentando, serán los más pobres quienes cargarán con la peor parte porque no podrán hacer frente al precio de unos alimentos que son vitales para su salud y para la salud del planeta", asegura Sonnino. "No podemos depender exclusivamente del tercer sector y las organizaciones de la sociedad civil a la hora de alimentar a las personas hambrientas y pobres en tiempos de crisis".

El impacto sobre las familias más pobres es otro de los puntos que destaca el informe de ECIU, que alerta de que el precio de la cesta de la compra ha aumentado una media de 400 libras anuales (466 euros) para los hogares británicos. "La creciente amenaza de los impactos climáticos este año muestra todos los signos de sumarse a esto, exacerbando así la crisis del coste de la vida, empeorando el impacto en las familias más pobres y amenazando los niveles de nutrición".

Nuevos cultivos

Los cambios previstos en la producción y el suministro de frutas y verduras en el Reino Unido han obligado a plantear alternativas, como la reutilización de tierras para el cultivo o la incorporación de nuevos alimentos a medida que el clima también va cambiando en el país, con temperaturas cada vez más altas. Los expertos advierten, sin embargo, de que el cambio climático está provocando una mayor imprevisibilidad de los fenómenos meteorológicos y de que, en caso de que se produzca un clima favorable para incorporar nuevos cultivos en el Reino Unido, llevará tiempo implementar las herramientas, los métodos y las cadenas de suministros para producirlos a gran escala.

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