Asamblea General de las Naciones Unidas

Lula en la ONU: "El mundo es cada vez más desigual"

El presidente brasileño llama en la Asamblea General de las Naciones Unidas a "superar la resignación que nos hace aceptar como natural esta injusticia"

El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva.

El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva. / EFE

Abel Gilbert

"Hace 20 años hablé aquí por primera vez. Mantengo mi confianza en la humanidad. El cambio climático nos afecta a todos, destruye nuestros hogares y países. El hambre, que fue entonces el tema de aquel discurso, sigue afectando a millones de personas. El mundo es cada vez más desigual". El presidente Luiz Inacio Lula da Silva abrió la Asamblea General de las Naciones Unidas a tono con su propósito de recuperar el liderazgo global de Brasil. A lo largo de 21 minutos, Lula llamó a "superar la resignación que nos hace aceptar como natural esta injusticia". Los que "gobiernan el mundo", señaló, en relación a los países desarrollados, deben tener "voluntad política" para dar solución a las grandes asimetrías.

Según el diario paulista Folha, Lula volvió a la ONU para recuperar la "orientación internacionalista de la diplomacia brasileña tras cuatro años de aislamiento", durante el Gobierno del ultraderechista Jair Bolsonaro. El presidente recibió aplausos de los presentes al hacer veladas referencias críticas a su antecesor. "Brasil se reencontró con el mundo, ha vuelto para aportar su contribución ante los grandes desafíos mundiales. Volvemos a reivindicar el diálogo respetuoso con todos. La comunidad internacional está enfrascada en una serie de crisis: la pandemia, el hambre, la intolerancia, el racismo". También mencionó "la inseguridad militar y energética amplificadas por las crecientes tensiones geopolíticas", en inequívoca referencia a la guerra en Ucrania. Ese conflicto "pone de relieve nuestra incapacidad colectiva para hacer cumplir los propósitos y principios de la Carta de la ONU".

El mandatario reconoció la existencia de “dificultades para lograr la paz”. Advirtió no obstante que “ninguna solución será duradera si no se basa en el diálogo”. En ese sentido llamó nuevamente a "trabajar para crear espacios de negociación" y dejar de invertir "demasiado en armamento y demasiado poco en desarrollo".

Encuentro con Zelenski

Se espera para el miércoles un encuentro entre Lula y su par de Ucrania, Volodimir Zelenski que ponga fin a meses de desencuentros que se remontan a 2022. Un año atrás, el entonces candidato a presidente consideró que el ucraniano era "tan responsable como (el presidente ruso Vladimir) Putin" por la guerra". Además, responsabilizó a Washington de incentivar el conflicto. Lula y Zelenski estuvieron a punto de reunirse en mayo, durante la cumbre del G7 en Japón, pero ambos equipos dijeron que surgieron problemas de agenda. "Es mayor de edad, sabe lo que hace", dijo entonces Lula sobre la frustrada cita.

Actuar contra el cambio climático

El líder del Partido de los Trabajadores repitió los conceptos que se escucharon en la reciente cumbre del G77+ China en La Habana: los países en desarrollo no quieren repetir un modelo contaminante de crecimiento económico como el que experimentaron Europa y Estados Unidos. "Actuar contra el cambio climático implica pensar en el mañana y hacer frente a las desigualdades históricas. Los países ricos crecieron en base a un modelo con una alta tasa de emisiones de gases nocivos para el clima".

Según Lula, Brasil tiene una de las matrices energéticas "más limpias del mundo" y, desde esa experiencia su Gobierno retoma los esfuerzos para vigilar y combatir los delitos ambientales. "El mundo entero siempre ha hablado de la Amazonia, ahora es la Amazonia la que habla por sí misma".

A su vez, hizo una encendida defensa de los BRICS, el grupo que Brasil fundó con China, India, Sudáfrica y Rusia, y que semanas atrás ha decidido sumar a nuevos países. "La ampliación fortalece la lucha por un orden que dé cabida a la pluralidad del siglo XXI. Somos una fuerza que trabaja por un comercio mundial más justo. El desempleo y la precarización del trabajo ha minado la confianza de las personas; y el neoliberalismo ha empeorado la desigualdad económica y política. Su legado es una masa de personas excluidas y marginadas. Repudiamos a los que utilizan a los inmigrantes como chivos expiatorios".

Reforma del Consejo de Seguridad

Desde hace años, Brasil aboga por una reforma del Consejo de Seguridad, cuya parálisis fue señalada por Lula. El presidente también mencionó el problema de la libertad de prensa y puso el acento en el caso del australiano Julian Assange: “No puede ser castigado por informar a la sociedad de manera transparente y legítima”.

La lista de personas con las que se reunirá el presidente estadounidense incluye también a los líderes de cinco países asiáticos y al primer ministro de Israel, Binyamin Netanyahu. Será la primera vez que el primer ministro se reúna en persona con Biden desde que éste asumió el liderazgo del país en Oriente Próximo hace nueve meses, un retraso poco característico dada la histórica cercanía entre estadounidenses e israelíes.

Durante su estadía en EE.UU., Lula volverá a encontrarse con su colega norteamericano, Joe Biden, siete meses después de haber visitado la Casa Blanca con resultados que la prensa brasileña calificó de decepcionantes, especialmente en lo que respecta a los aportes de Estados Unidos al Fondo Amazonia, al que Washington acababa de adherirse. Brasil esperaba mucho más que una donación de 50 millones de dólares. Dos meses después de aquel encuentro, Biden anunció su intención de inyectar otros 500 millones de dólares. Esa suma debe ser aprobada por el Congreso norteamericano.