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Rebeca Atencia, reina de los simios

"Los chimpancés me hacen entender mejor al ser humano que soy", afirma la joven gallega, que dirige el centro que la fundación de la primatóloga y premio "Príncipe" Jane Goodall tiene en el Congo

Rebeca Atencia, Jane Goodall y otros empleados del centro, en la suelta de un chimpancé. ijg / f. turmo

Una española de Ferrol, Rebeca Atencia, de 46 años, se ha convertido en la nueva Jane Goodall, premio "Príncipe de Asturias" de Investigación 2003. De hecho, Atencia, doctora en Veterinaria, dirige desde hace dos décadas el centro para la recuperación de chimpancés que la fundación de la afamada primatóloga inglesa tiene en Tchimpounga (República del Congo). Desde allí, Atencia cuenta su vida en uno de los principales santuarios para estos simios del planeta.

Muy humanos

"Cuando convives con chimpancés durante años, al final terminas creando un vínculo emocional muy fuerte con ellos, incluso llegas a crear verdaderas amistades con chimpancés concretos. A veces olvido que los chimpancés son una especie diferente, te pueden hacer sentir emociones muy fuertes. Son extraordinariamente parecidos a nosotros. Los chimpancés te hacen ver que no hay una línea claramente definida que separe a los humanos del resto de animales, es una línea muy difusa. No dejo de sorprenderme por las cosas que pueden llegar a comprender y realizar. Un chimpancé puede reír, deprimirse, alegrarse, engañar, interesarse por algo e investigar, utilizar estrategias complejas y valerse de instrumentos para conseguir sus objetivos. El chimpancé puede empatizar con los otros, ayudarles a resolver problemas y a asociarse para ser más fuertes. Al igual que con otros animales, con los chimpancés descubres rápidamente que son individuos con sus particularidades. Cada uno tiene su propia personalidad, su manera especial de enfocar los problemas y de resolverlos, de entender su entorno y adaptarse a él. En este sentido no existen diferencias aparentes entre humanos y chimpancés. Los chimpancés tienen grupos sociales con alianzas entre individuos, estrategias para alcanzar el poder. Muchas veces me sorprenden lo cercanos a nosotros que son a nivel social. Y las alianzas que establecen las madres con sus hijos son ataduras incondicionales, de por vida. Es un privilegio poder asistir a todos estos momentos tan íntimos en la vida de un ser tan cercano a nosotros. Los chimpancés me han enseñado a entender mejor al ser humano que soy".

Peligro de extinción

"En los últimos cien años, la cantidad de chimpancés salvajes ha disminuido drásticamente, hay incluso ciertos países de los que han desaparecido, Togo, Burkina Faso, Benín y Gambia. La Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN)los ha catalogado como animales en peligro de extinción, esto quiere decir que si no se toman medidas urgentes esta especie podría desaparecer de su hábitat natural en el futuro próximo. Las principales amenazas que tienen los chimpancés salvajes son la deforestación y la caza furtiva. Los bosques selváticos son frágiles, muy vulnerables a las explotaciones forestales, y esto no sólo afecta a los chimpancés, sino también a muchas otras especies de grandes simios, como los gorilas, los bonobos y los orangutanes. Para abatir un solo árbol es necesario meter maquinaria muy pesada a través del bosque y esto provoca un deterioro grave entre los otros árboles cercanos. Al derribar y arrastrar el tronco hasta los caminos se destruye una gran cantidad de vida vegetal y animal. Además, estos caminos abiertos luego son aprovechados por cazadores furtivos para extraer una gran cantidad de animales. Es realmente dramático. En el caso de República del Congo, hace una década teníamos una media de 12 a 14 bebés chimpancés huérfanos que llegaban al año al centro de rescate. Era algo desesperante, se veían bebés chimpancés vendiéndose en la calle de la ciudad de Pointe Noire como algo completamente normal. Pero entonces empezamos una campaña educativa y, poco a poco, la cosa empezó a cambiar, nos empezaron a llegar menos chimpancés bebés, hasta llegar a un punto en el que ya casi ni llegaban. Desde hace dos años y medio sólo nos ha llegado uno".

No son mascotas

"En el Congo es cada vez más extraño ver a gente que tenga un chimpancé como animal de compañía. Seguramente que hay, pero cada vez menos. Las campañas educativas han tenido bastante impacto. En España también se podían ver hace unos años a fotógrafos paseando por las zonas turísticas con un chimpancé como reclamo. Ahora eso tampoco se ve. Es una cuestión de educación. Sin embargo, en otros países sigue existiendo gente que tiene chimpancés como animales de compañía y esto es un grave error. El chimpancé es un animal salvaje que debe tener unas condiciones específicas de espacio, nutrición y socialización acordes con su especie. Además, los chimpancés pueden ser muy peligrosos, por lo que la idea de tenerlos como animal de compañía es completamente desacertada. Para que un chimpancé bebé llegue a tu casa como mascota han sido necesarios una serie de pasos previos realmente crueles. Para arrancarlo de los brazos de su madre, el cazador furtivo ha tenido que matarla primero, a ella e incluso a otros miembros del grupo. Puede llegar a ser una carnicería. Los bebés chimpancés ven matar a su madre, que a esa edad es el centro de su miniuniverso, delante de sus propios ojos. Ven cómo su madre es descuartizada y los trozos ahumados por los furtivos. Y muchas veces cuando los bebés intentan escapar o ayudar a su madre, los furtivos les echan agua hirviendo sobre sus cuerpecitos o les dan un machetazo para pararlos".

Rescate y rehabilitación

El Centro de Tchimpounga actúa en varios frentes a la hora de proteger a los chimpancés. Tres de ellos son, respectivamente, el rescate, la rehabilitación y la reintroducción en su hábitat. La doctora Atencia los describe así: "Cuando los chimpancés son rescatados llegan al centro con la mirada perdida. Nosotros, los humanos, que hemos matado a lo que el bebé chimpancé más quería en el mundo, ahora ¡queremos ser sus amigos! Es algo difícil de entender para esa mente traumatizada que ha visto con sus propios ojos la muerte de su madre. Los primeros días son muy importantes, tenemos que devolverle la seguridad perdida. Por ello, la cuidadora tiene que estar con el bebé en permanencia, día y noche. Y las primeras noches son clave, los bebés chimpancés huérfanos se levantan gritando y con signos de ansiedad. La presencia de la cuidadora, con sus caricias y palabras de confort, hace que retomen el sueño. Poco a poco estos signos de ansiedad empiezan a disminuir, hasta el punto de que desaparecen. Éste es un ejemplo de la complejidad de la rehabilitación en chimpancés. Tenemos que valorar muchos parámetros, médicos, psicológicos, genéticos, etcétera. Y la rehabilitación es un proceso muy largo, ya que los chimpancés son una especie longeva, puesto que pueden vivir 60-70 años".

La reintroducción

"El proceso de reintroducir chimpancés en su hábitat natural es complejo, largo y requiere de un gran esfuerzo. Hemos avanzado mucho en los últimos años para conseguirlo. Logramos realizar una extensión de la reserva de Tchimpounga hasta alcanzar el río Kouilou en su vertiente norte, donde existen tres inmensas islas cubiertas de densos bosques. Son el lugar ideal para muchos chimpancés del centro de rescate. Allí se habitúan a vivir en la selva, subir a los grandes árboles, sortear peligros, dormir en nidos sobre las ramas y buscar comida. Muchos de esos chimpancés se quedarán probablemente allí para siempre. Algunos, los más aptos, serán transferidos al parque nacional de Conkouati Douli, donde estarán en una selva abierta sin ningún tipo de barrera física con otras comunidades de chimpancés. La reinserción en islas también tiene cierto riesgo, porque si el chimpancé no está bien integrado en su grupo puede ser perseguido por sus congéneres y en el pánico puede caer al agua y ahogarse. Por ello es importante valorar el estado psicológico y la estabilidad social en el grupo antes de liberarlo. La reintroducción en selva abierta conlleva los riesgos de la jungla, es decir, posibles ataques de otras comunidades de chimpancés, así como otros animales como elefantes, búfalos, etcétera. En la selva tienen que encontrar su propia comida, agua? Nosotros tenemos que estar con ellos para darles apoyo, pero poco a poco ellos van encontrando su lugar. Los chimpancés van con collares de telemetría, lo que nos permite seguirlos a distancia, monitorearlos y poder intervenir en caso de necesidad. Aun así, algunos nunca se vuelven a adaptar a la vida en la selva, por lo que tenemos que estar abiertos a darles otras opciones como islas u otro tipo de entornos. La zona en la que se reintroducen chimpancés tiene que recibir protección de por vida. Al proteger chimpancés y reintroducirlos en la selva, protegemos a su vez un gran número de especies diferentes. Para seguirlos y proteger la selva empleamos mano de obra local, algunos son cazadores furtivos que se vuelven cuidadores de chimpancés. Esos mismos trabajadores nos dicen lo importante que ha sido para ellos el haber conocido los chimpancés de cerca, y que se han percatado de que son como nosotros. Es un verdadero crimen no hacer nada ante la posibilidad de su extinción".

La labor educacional

"El Instituto Jane Goodall en el Congo realiza series de televisión dirigidas a los más jóvenes y está creando un gran impacto. Es nuestra contribución para intentar cambiar el mundo un poquito. (...) No se realizan visitas a Tchimpounga por el momento. En un futuro próximo queremos desarrollar actividades turísticas que permitan a la gente visitar desde barcos las islas de los chimpancés. Queremos aprovechar el atractivo del proyecto para educar a la gente que venga a visitarnos y que vuelvan a casa con la mayor empatía posible hacia los chimpancés".

Mensaje final

"Muchas veces nos cuesta entender que lo que hacemos en un lugar puede tener un impacto negativo en el otro lado del mundo. Una de las principales amenazas del chimpancé es la destrucción del hábitat. Esa desaparición de la selva se está produciendo por la tala abusiva, y la tala desmedida se debe a la demanda excesiva, y esta demanda está viniendo de todo el mundo. Si cada uno de nosotros empieza a tomar responsabilidad, simplemente dejando de comprar madera tropical... Es muy sencillo, si queremos una mesa de madera, que sea de una plantación, con eso nos aseguramos de que no proviene de una tala ilegal. Cuando compramos una mesa de manera responsable en España, estamos salvando la vida de un chimpancé en Africa".

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