Langreo, E. P.
El despido de un trabajador municipal con contrato laboral indefinido fue uno de los primeros asuntos analizados ayer por la corporación municipal. El Gobierno local dio cuenta del cese del empleado, que accedió al Ayuntamiento a través de un plan de empleo, y al que el Juzgado de lo Social de Mieres reconoció el despido improcedente y el Tribunal Superior de Justicia de Asturias (TSJA) la nulidad. Este fallo obligaba a readmitirlo y a pagarle los salarios que había dejado de percibir.
Finalmente, el Consistorio recurrió a un despido objetivo por causas económicas y organizativas. El portavoz de IU, Jesús Sánchez, criticó que el Gobierno local «aplicase la Reforma laboral después de decir que está en contra». La alcaldesa, María Fernández, aludió a las lagunas legales que existen en las contrataciones de los planes de empleo que lleva a que algún trabajador reclame continuar en el puesto. «No se puede intentar entrar por la puerta de atrás», dijo antes de señalar que no hubo «persecución» al trabajador tal y como denunció.
En la sesión plenaria se dio luz verde al destino de 20.000 euros a actuaciones en los cementerios. Además, los cuatro grupos de la oposición apoyaron, con la abstención del PSOE, solicitar que el plan estratégico de residuos del Principado sea sometido a debate y aprobación de la Junta General y que el Ayuntamiento formule alegaciones. La regidora indicó que el documento está siendo estudiado por los técnicos municipales y que será presentado la próxima semana en la comisión de Urbanismo para analizar si se presentan alegaciones.
