El fallecimiento repentino, a causa de un infarto, en la mañana de ayer, del agente de la Policía Local de Valdés José Aurelio López Pérez ha supuesto un duro mazazo para la capital, Luarca, y para todo el municipio. Conocido popularmente como "Herrera", y de 62 años, el fallecido se encontraba cercano a la jubilación, para la que ya tenía planes de disfrute con su familia y sus amigos.

López Pérez no estaba ayer de servicio: se encontraba disfrutando de un día de descanso en un establecimiento hostelero cercano al puerto luarqués. Mientras tomaba un café se sintió indispuesto y, aunque sus acompañantes dieron aviso inmediato a los servicios sanitarios, y éstos determinaron su traslado urgente al Hospital de Jarrio, nada se pudo hacer por salvar su vida.

La pérdida es un duro golpe para familiares, amigos y conocidos, y, en general, para todos los valdesanos. Herrera era un agente muy conocido y apreciado por los vecinos, que destacan de él su sentido del humor, su generosidad y su profesional desempeño en todo momento.

La Policía Local de Valdés, a través de las redes sociales, quiso agradecer todo el cariño recibido tras la pérdida: "Su andadura en el servicio a los demás y a su concejo dejarán huella, y será recordada como la de todas aquellas personas que le precedieron. Desde esta plantilla queremos agradecer las muestras de cariño que nos hacen llegar, siendo estos unos momentos duros de asumir", reza el comunicado.

Muchas personas han expresado sus sentimientos a través de las redes sociales, donde se intercalan mensajes de apoyo a la familia con elogios a la labor que siempre desarrolló Herrera.