“Vamos a buscar sí o sí una solución porque no podemos perder capital humano. Si apostamos por el medio rural, hay que buscar una solución para estos chavales y en ello están volcados la Consejería de Educación y el Consorcio de Transportes”, dijo ayer en Castropol el presidente del Principado, Adrián Barbón, a las familias que luchan por un transporte digno que permita a los jóvenes del medio rural formarse en los ciclos formativos o los bachilleratos de su elección que están dispersos por el Noroccidente.
Barbón, que impartió la conferencia “Presente y futuro del medio rural en Asturias” dentro de la programación del Foro Comunicación y Escuela, hizo hincapié en que su gobierno no tiene la obligación legal de dar una solución a estos estudiantes, al tratarse de etapas educativas no obligatorias, pero sí “la obligación moral de dar algún tipo de solución, ya sea ayudas directas o la creación de una línea que no sea solo para estudiantes”. Al hilo del transporte, ayer se hizo pública la decisión de Educación de ampliar este curso el importe máximo de la ayuda individualizada al transporte por estudiante, que pasa de 6.000 a 8.000 euros.
El presidente del ejecutivo regional, a preguntas del moderador, el ex subdirector de LA NUEVA ESPAÑA Alberto Menéndez, se refirió a la situación de las cercanías en Asturias. Lo hizo al hilo de un artículo de este periódico que refería el calvario de viajar de Castropol a Oviedo: cuatro horas de trayecto salpicadas de constantes retrasos y averías del tren. “Es una cuestión de voluntad política”, respondió Barbón, quien señaló que España ha apostado fuerte por la movilidad a larga distancia a consta de “abandonar las cercanías”. Añadió que el gobierno central tiene en marcha un plan de choque con una inversión de 295 millones, aunque, admitió, no será “la solución a todos los problemas”.
El coordinador del Foro Comunicación y Escuela, el docente Luis Felipe Fernández, fue el encargado de abrir el acto, que contó con la participación de buena parte de los alcaldes socialistas de la comarca, de diputados del PSOE y del presidente de la Junta General del Principado, Marcelino Marcos Líndez. Reivindicó Fernández, al frente de este proyecto educativo del instituto veigueño Elisa y Luis Villamil, la importancia de poner en valor “lo que significa y aporta el medio rural en Asturias” y subrayó la exigencia de que sea posible desarrollar en los pueblos proyectos de vida “dignos”. En este sentido, contó con el respaldo del presidente regional: “Nuestro medio rural tiene que ser un lugar para vivir y trabajar yme niego a que sea un parque temático para los que viven en las ciudades”.
El jefe del ejecutivo autonómico se mostró convencido de que la pandemia funcionará como “un catalizador” del medio rural porque ha servido para demostrar que es “más seguro” vivir en los pueblos y, también, que en ellos la calidad de vida es mayor. En su discurso, Barbón defendió sus apuestas para la zona rural, como mantener unos servicios públicos de calidad en igualdad de condiciones a los que se prestan en los entornos urbanos. Presumió en este punto de la red sanitaria y también de los colegios rurales agrupados, con más de 1.800 alumnos y en los que la ratio es de 11 alumnos por profesor, habiendo dieciocho centros que tienen menos de cinco alumnos.
Sacó pecho del turismo rural, que nació en Taramundi, de la inversión de los fondos Leader, la primera o segunda más alta del país, o del esfuerzo que se está haciendo para extender el acceso a Internet. “Asturias es rural y negar la ruralidad de Asturias es negar su propia identidad”, concluyó.
“Que vengan al Noroccidente a ver si se habla o no se habla aquí la fala; se habla y se entiende”
El presidente de la asociación cultural Xeira, Xabiel Menéndez, abrió el tiempo de coloquio con una reflexión sobre la situación del medio rural en la que, entre otros asuntos, subrayó la importancia de la oficialidad del asturiano y el gallego-asturiano para que los niños “se empoderen” y “se sientan orgullosos de su pueblo y no se vayan”. El presidente, Adrián Barbón, recogió el guante aplaudiendo unas palabras en una lengua que “se entiende perfectamente”. “Es un insulto a la inteligencia decir que no se entiende. La cuestión es respetar la cultura”, señaló el presidente quien hizo alusión al polémico tuit de la gerente de la Sociedad Mixta de Turismo del Ayuntamiento de Ferrol, María Luisa López, afirmando que el asturiano “solo se escucha en aldeas” y que lo habla “gente mayor sin estudios”. “Cuando dicen que no se habla yo les digo, perdone, vayan al Noroccidente a ver si no se habla el gallego-asturiano o fala eonaviega. Tengo familia aquí, me gusta y sé de sobra cómo se habla y que se entiende perfectamente”, añadió Barbón. Sobre si será posible lograr la cooficialidad en esta legislatura, Barbón reconoció que aún no existe un acuerdo y que, de haberlo, lo haría público. Cuestionó, eso sí, a quienes tildan de “irrisoria” la mayoría de diputados que la apoyan: “Hay 27 a favor y 18 en contra, es una mayoría de primer nivel, pero de momento estamos en un trabajo muy incipiente”. En el coloquio se abordaron temas variados como los problemas del saneamiento, la burocracia o el lobo.
