Las plantas de biometano que proyecta CCC Energo en Gijón y Castropol podrían estar listas en un plazo de dos años

La multinacional energética CCC Energo negocia con Sogepsa la compra de dos parcelas en el polígono industrial de Barres (Castropol), donde plantea implantar una de las tres plantas que proyecta para Asturias. La más avanzada es la que se quiere construir en el polígono de Lloreda (Gijón), inmediatamente después iría la de Castropol y la tercera estaría en el Suroccidente, aunque aún no está definido el lugar exacto. Las primeras plantas podrían estar operativas en un plazo de dos años, si todo sale según los planes de este grupo, adelantados por LA NUEVA ESPAÑA el pasado domingo.

“Normalmente lo más difícil es pasar todas las autorizaciones y licencias. El proyecto se puede realizar en medio año, luego vienen las autorizaciones y esto podría tardar un año o año y medio y la construcción es bastante fácil y rápida. Entonces calculamos que si nos ayudan y conseguimos las autorizaciones en dos años podemos empezar a trabajar”, señaló el CEO y cofundador de la compañía. Sergio Kiria se desplazó ayer a Castropol para mantener un primer encuentro con los ganaderos de este municipio, una de las potencias lácteas de la región.

En compañía del jurista Javier Junceda, que está ofreciendo asesoramiento legal a la firma, Kiria explicó que su compañía ya tiene construidas o en fase de construcción un total de diecisiete plantas parecidas a la que ahora quieren implantar en la región para producir biometano. Cada planta tendrá capacidad de diez megavatios, que permitirán una producción de mil metros cúbicos de biometano puro. Para ello, procesarán entre 200.000 y 240.000 toneladas de purín, pero también les sirven otros residuos agrícolas como paja mojada, residuos forestales y hasta restos de comida.

A la compañía energética le gusta el polígono de Castropol porque dispone de conexión al gasoducto al que enviarán el biometano resultante. “Aquí no hay ciudades grandes y tenemos más terreno y la compañía Sogepsa dispone de un parque industrial muy moderno y bueno. Es importante porque ya tenemos gasoducto para conectarnos con la red”, añadió Kiria, quien añadió que su iniciativa tiene el respaldo de Europa pues “hay que llenar los gasoductos de Europa para ser independientes del gas ruso”.

Kiria explicó a los ganaderos que no van a pagar por la recogida del purín y que su idea es poner en marcha un sistema de recogida gratuito y moderno. “No vamos a apretar a los ganaderos porque para nosotros su purín es materia prima”, indicó. Una vez reciban el purín le harán un pre tratamiento para separarlo de la arena: “En Asturias los ganaderos usan arena para las camas de las vacas, entonces hay que hacer un pre tratamiento especial para sacar la arena del purín y en esto tenemos mucha experiencia. Tenemos máquinas especiales para hacerlo”.

La planta de Gijón tiene el objetivo de atender especialmente a las ganaderías de Gozón. En el Suroccidente barajan enclaves en Tineo y Salas, pero aún está por determinar la ubicación definitiva. No descartan plantear otra en el Oriente, en el entorno de Ribadesella, aunque el hándicap de la firma es que requiere suelo industrial y conexión al gasoducto. “Nuestro proyecto típico de 1.000 metros cúbicos de biometano tiene un coste de entre 18 a 20 millones de euros, depende de la parcela y del trabajo adicional”, señaló Kiria quien confirmó que ya están trabajando en el proyecto básico. La compañía deja claro que la correcta gestión del purín, para cumplir con la normativa europea, es un problema sin resolver en Asturias. “Muy pronto la ley no va a permitir guardar en pozos el purín. Hay que arreglar esto y proponer un servicio bueno y nosotros tenemos muchísima experiencia”, señaló Kiria.

El Alcalde de Castropol, Francisco Javier Vinjoy, explicó tras el encuentro que se ofreció la información básica del proyecto y se resolvieron dudas. Evita dejar clara la postura del consistorio y señala que en este asunto tendrán la última palabra los ganaderos: “Va a depender de su valoración, tendrán la última palabra. Si el sector lo ve bien, como una oportunidad viable, nosotros somos sus representantes y tendremos en cuenta su criterio”.