Valdés prohíbe temporalmente el consumo de agua en Trevías y Luarca por la turbidez causada por las crecidas de los ríos

El regidor espera que problemas de este tipo se solucionen una vez se construya la nueva estación de tratamiento, una de las obras que se exigirá al nuevo gestor de este servicio

Color del agua en una vivienda de Luarca.

Color del agua en una vivienda de Luarca. / R. T. C.

"Tras la fuerte crecida de los ríos Negro y Esva debido a las grandes precipitaciones registradas durante los últimos días, el agua que entra en las captaciones presenta una gran turbidez, por lo que la calidad no reúne las condiciones para el consumo humano". Es la información divulgada este martes por el Ayuntamiento de Valdés, aconsejando a los vecinos de las parroquias de Luarca y Trevías no consumir temporalmente el producto que sale del grifo. "Cumplimos escrupulosamente la ley y cuando los análisis dan turbidez procedemos así. Esto es habitual cuando hay riadas, no es la primera vez que se produce. Esperamos que en dos o tres días ya pueda consumirse de nuevo", señala el Alcalde de Valdés, Óscar Pérez.

En concreto, el agua no apta para el consumo (sí se puede usar en el resto de tareas cotidianas) es la que abastece a los núcleos de Villar, Barcellina, Luarca, El Chano, San Martín, Almuña (casco urbano), Trevías, Gamones, Villanueva, Rebollar, San Feliz, Cortina y Pescaredo. "Los problemas no se registran en todas las zonas que dependen del Ayuntamiento, ya que por ejemplo, núcleos como Cadavedo no tienen problema alguno", señala el regidor, que informará a los vecinos mediante otro bando una vez los análisis vuelvan a registrar los parámetros deseados. El regidor aprovecha para advertir a las cooperativas de aguas que existen a los pueblos, así como a la parroquia rural de Barcia de que acometan los controles oportunos en sus traídas. "Deben controlar esa agua igual que lo hace el Ayuntamiento, que realiza análisis diarios. Les pediremos información pertinente para saber que así se está haciendo", señala el regidor.

Aunque el Alcalde valdesano insiste en que este problema se registra periódicamente, sí que confía en que se pueda resolver una vez se adjudique el nuevo contrato del servicio de agua. Ahora mismo, la adjudicataria es la firma Aqualia, pero el contrato está prorrogado y la intención es que este año estén listos los nuevos pliegos para sacarlo a contratación. Entre los requisitos que se exigirá a la nueva compañía que se haga cargo del agua está el hecho de ejecutar obras de mejora de la traída, entre ellas la construcción de una Estación de Tratamiento de Agua Potable (ETAP). Esta infraestructura, señala el regidor, debería construirse en lo que resta de mandato.

"No puedo dar más detalles del pliego de condiciones, pero sí que entre las exigencias, la principal y más importante será disponer de esta nueva ETAP", añade el regidor. Pérez confía en que este año se pueda iniciar el proceso de contratación, aunque admite que son trámites muy lentos.