La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Paco G. Redondo

Más sofismas

Ciudad sin jóvenes ni coches, pero llena de insectos

Dos malas noticias para la cruzada contra los coches del clan de Ana González y Aurelio Martín. El Molinón está entre los 15 candidatos para ser sede del mundial de fútbol 2030 –es probable que quede eliminado cuando se elijan los 11 estadios–, lo que conlleva, además de aumentar el aforo a 40.000 espectadores, contar con aparcamientos suficientes. ¿No podrían ir todos desde Montevil, Avilés o Ponferrada en patinete o en autobús? Menuda desgracia; en vez de estar pensando cómo quitan 50 plazas de aparcamiento este año y 100 el que viene. Y la segunda, la sociedad Quirón construirá un nuevo hospital en el sur de Gijón, ¡y con plazas de aparcamientos! (¿pero no sería mejor que los enfermos vayan al hospital en bicicleta?). Y encima les pondrán carne en el menú para comer. Así no vamos a conseguir boicotear el capitalismo perverso.

Ya saben que la última idea de los "progre guays" del gobierno municipal gijonés es no segar los jardines por la diversidad biológica. Podían haber excusado es para ahorrar lo que tienen que gastar en el gas que el gobierno sanchista le compra a la Rusia de Putin, o para financiar algo en el entorno de la estación intermodal, pero es para que haya más insectos. Que nos invada la mosca tsé-tsé (la mosca del sueño tropical) no nos hace mucha falta, pues ya les tenemos a ellos al marearnos cambiando de sitio la estación intermodal en los proyectos 400 metros aquí, 400 metros allá cada mandato, y de paso pasan los cuatro años y no hay que presupuestar las obras. Gijón y Asturias serán un páramo verde, sin apenas jóvenes, pero un páramo verde y progresista con insectos.

Por cierto, estos que quieren llenar la ciudad de insectos, y no sabemos si también de jabalís y lobos, ¿han pensado en los miles y miles de perros que hay en Gijón? ¿Cómo les puede afectar en materia de pulgas, garrapatas e insectos transmisores de enfermedades?

Ahora dicen que el intercambiador del Humedal permitirá paradas de numerosos autobuses hasta construir la estación intermodal. O sea va a ser una estación de autobuses al aire libre. Tantos espacios disponibles, pues ni viviendas, ni comercios, ni coches ni equipamientos; un pulmón de autobuses en el solarón. Menos mal que como con ellos pronto no habrá casi población en edad activa, no habrá coches ni congestión del tráfico. Todo idílico. Y menos mal que en Asturias casi no llueve...

Compartir el artículo

stats