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Fernando Granda

La otra vuelta al mundo, la de hace 150 años

"Le Tour du monde en quatre-vingts jours", de Julio Verne, cumple siglo y medio

Una fue real y otra ficticia. Se celebran este año los quinientos años de la circunnavegación a la Tierra de la Nao Victoria, capitaneada por Juan Sebastián Elcano, y los ciento cincuenta del viaje literario inventado por Julio Verne en "La vuelta al mundo en 80 días" ("Le Tour du monde en quatre-vingts jours"). Aniversario que conmemora aquel 7 de noviembre de 1872 en el que se publicó el primer capítulo del folletín firmado por el imaginativo autor en el periódico francés "Le Temps" y que relataba día a día el viaje alrededor del globo de un rico inglés y su mayordomo para ganar una apuesta. Un relato que luego se reuniría en el libro más famoso del escritor con el mencionado título por entregas.

Fueron dos aventuras muy distintas y en sentido contrario. La real, llena de calamidades. La ficticia, llena de contrariedades subsanables con el dinero y la fortuna. Ambas apasionantes. En ellas se reflejó la imaginación y una visión de anticipación. Si en el viaje iniciado por el portugués Fernando de Magallanes y terminado por Elcano se buscaba el preciado tesoro de las especias, en el de Phileas Fogg y su mayordomo Jean Passepartout, se intentaba llevar a la realidad práctica los inventos de la época. Cuestión en la que el escritor nacido en Nantes plasmó en sus premonitorias obras.

En sus sesenta "Viajes extraordinarios" Julio Verne mostró su capacidad imaginativa y adelantándose a su tiempo nos mostró un batiscafo que recorrió "Veinte mil leguas de viaje submarino"; predijo una serie de datos increíbles que muchos años después de cumplirían sobre los viajes espaciales en "De la Tierra a la Luna" y "Alrededor de la Luna"; se figuró un helicóptero en "Robur el Conquistador"; escribió sobre las armas de destrucción masiva en "Los quinientos millones de la Begún" y aunque su temeroso editor lo ocultó, por considerarlo aciago y deprimente, el que se puede considerar su primer relato anticipador, "París en el siglo XX" –escrita en 1860, guardada en una caja fuerte casi 130 años y, por fin, publicada en 1994 por su bisnieto, increíblemente hace solo 28 años–, nos contó lo que llegaría a nuestra civilización hace poco más de tres décadas: internet, los rascacielos de cristal, los automóviles a gas, los trenes de alta velocidad, las computadoras…

Si los relatos de Julio Verne se fueron llevando a la práctica y se cumplieron muchos de sus augurios aún falta alguno por conseguirse, aunque posiblemente se alcance antes de lo que predijo este autor de literatura científica fallecido en Amiens y es lo que señalaba en uno de su veintena de cuentos: "En el siglo XXIX: la jornada de un periodista americano en el 2889", viajes en un futuro aún lejano con medios de transportes a 1.000 kilómetros por hora, cuestión que actualmente promueve el polémico Elon Musk y que está en estudio según declaraciones de científicos valencianos que hablan de proyectos financiados por fondos estadounidenses, británicos, suizos y españoles, entre otros, y concebidos para viajar, por ejemplo entre Madrid y París en poco más de una hora.

"La vuelta al mundo en 80 días" es una de las obras más leídas del francés Julius Verne, alguna de las cuales figura entre los libros más vendidos de todos los tiempos, con más de sesenta millones de ejemplares. Su traducción a numerosos idiomas se completa con adaptaciones al teatro, frecuentes versiones cinematográficas, adaptaciones radiofónicas, así como series de televisión y músicas alusivas a una aventura que motivó la curiosidad de las gentes en el último siglo y medio.

Si semanas atrás conmemorábamos aquella pionera vuelta de navegantes españoles que certificaron que la Tierra es un enorme globo, estos días celebramos la publicación de una obra de aventuras que ciento cincuenta años después de su primera impresión sigue encandilando a lectores de todo el mundo.

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